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El presidente estadounidense suelta un golpe que no estaba en los planes de nadie. Trump toma un protagonismo clave en la selección de sedes que ya fueron anunciadas por la FIFA…
Seattle, San Francisco, Los Ángeles, Houston, Dallas, Kansas City, Atlanta, Miami, Boston, Philadelphia y Nueva York son las sedes que tendrá Estados Unidos en la próxima Copa del Mundo 2026. El país gobernado por Donald Trump será el que tenga mayor cantidad de partidos del Mundial. Excepto el inaugural (Ciudad de México), los partidos más trascendentales se jugarán en Estados Unidos.
Sin embargo, en el último tiempo, Estados Unidos ha sufrido una ola de atentados tremendos y en muchas ciudades se respira una tensión social insoportable. El detalle es que Donald Trump no puede encontrar la solución para bajar esa tensión y por ende, está evaluando seriamente una medida extrema, aplastante.
Bombazo para el Mundial 2026
Desde el Salón Oval de la Casa Blanca, Trump fue categórico y anunció que estudia cambiar algunas sedes mundialistas: “Si creemos que alguna ciudad puede ser siquiera un poco peligrosa para el Mundial, dado que se juega en tantas sedes, no lo permitiremos. Moveremos un poco las cosas. Pero espero que no sea necesario. Hay ciudades que están gobernadas por lunáticos de la izquierda radical que no saben lo que se hacen…”.
Ciudades gobernadas por los demócratas
El problema para Donald Trump es que de todas las sedes que tiene para la Copa del Mundo, la mayoría son ciudades gobernadas por los demócratas. Los Ángeles, Nueva York, Atlanta, Houston, Boston o Philadelphia. “Si consideramos que una ciudad va a ser, aunque sea mínimamente, insegura para el Mundial o los Juegos Olímpicos (en Los Ángeles en 2028), pero especialmente para el Mundial FIFA, dado que la competición se extiende por tantas ciudades, no permitiremos que los partidos se celebren; los aplazaremos…”, sentenció Trump.
Trump entiende que la Copa del Mundo es un escenario perfecto para que los radicales de izquierda se manifiesten públicamente con determinadas ideas que él no comparte. El presidente estadounidense cree que hay un alto riesgo de situación extremas como protestas sociales en las calles o en medio de los partidos de la Copa del Mundo.
Sorteo en Manhattan
Esto es un problema enorme para FIFA. Si hay cambio de sede, es algo que debe determinarse ahora porque el próximo 5 de diciembre se realizará el sorteo en Manhattan. Los seleccionados conocerán las ciudades donde jugarán sus respectivos partidos.
De momento, Trump tampoco ha dado a conocer las ciudades que podrían ingresar a la Copa del Mundo. Pro no se descarta que ya tenga un plan secundario. Lógicamente las ciudades en cuestión están contra las cuerdas porque ser sede mundialista significa un impacto enorme en lo económico, en el aumento de empleos vinculados al turismo y el consumo.