Se contrae actividad económica 0.9% mensual en julio, su mayor caída desde diciembre

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El resultado confirmó las expectativas de analistas que la economía mexicana extenderá su desaceleración hacia los próximos trimestres, bajo circunstancias de una elevada incertidumbre, donde destacan los vaivenes de la política comercial de la mayor economía mundial, EU.

La actividad económica en México languidece con una caída mensual en julio no vista desde diciembre pasado, según cifras desestacionalizadas publicadas el martes por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Analistas aseveran que la debilidad económica prevalecerá en lo que resta del año, además, rodeada de una elevada incertidumbre.

El Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE), clave para entender la trayectoria del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, se contrajo en julio 0.9% a tasa mensual.

El resultado colocó por debajo de la proyección de analistas, que esperaban una caída de 0.7%. También resultó inferior la estimación del Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE) dada a conocer la semana anterior, que había arrojado un descenso de la actividad de 0.5%.

Al interior del IGAE, y en comparación frente a junio, todos sus componentes presentaron tasas negativas, donde las actividades primarias, vinculadas a la Agricultura, la Pesca y la Ganadería, lideraron los ajustes, al caer 3.0%. Le siguieron las secundarias, representadas por el Sector de la Transformación, con un retroceso de 1.2?%, y las terciarias, o el Sector de los Servicios, con una variación negativa de 0.4%.

Si la comparación se hace contra julio de hace un año, el IGAE retrocedió 1.2%, donde las actividades primarias desplomaron 12.2% y las secundarias, 2.8%. El Sector Servicios, por el contrario, avanzó en un 0.4%.

Con cifras originales, expresadas sin el efecto calendario y las que siguen los analistas para sus proyecciones, las actividades económicas presentaron una caída de 1.1% a tasa anual, donde las actividades primarias desplomaron 12.3%, seguidas por el Sector de la Transformación, de 2.7%. En contraste, el Sector Servicios mostró un alza de 0.4%.

Estos números también resultaron muy por debajo de lo proyectado por el consenso del mercado, que bajo esta expresión apuntaba a una contracción de sólo la mitad de la cifra final, de 0.5%.

En el acumulado del año, entre enero y julio, el IGAE avanzó marginalmente 0.1% con cifras originales, donde las actividades primarias y terciarias crecieron 2.0% y 0.8%, respectivamente.

En contraste, el Sector Transformación, que integra las industrias manufactureras, incluyendo las de exportación, así como la construcción, la minería y los servicios públicos, exhibió un retroceso de 1.5%.

Fragilidad

Analistas pronosticaron que el agotamiento de la economía nacional persistirá en los próximos trimestres.

“Las perspectivas para los determinantes del crecimiento económico permiten anticipar que éste se mantendrá débil en los próximos meses, en un contexto de muy elevada incertidumbre”, expusieron Iván Arias, Rodolfo Ostolaza y Magdaleno Mendoza, del Banco Nacional de México (Banamex).

Janneth Quiroz, directora de análisis de banco Monex resaltó que en julio la actividad económica registró su mayor caída en lo que va del año, “confirmando” la pérdida de dinamismo generalizada entre los principales sectores económicos, en comparación al desempeño observado en la primera mitad del año.

“Hacia adelante, persisten algunos desafíos para la economía mexicana, condicionada por el complejo clima de incertidumbre derivado de las políticas arancelarias y las disrupciones se puedan generar en las cadenas de suministro, así como por el entorno político-económico interno, factores que podrían acentuar la fragilidad del crecimiento en los próximos meses”, resaltó Quiroz.

A la luz del resultado, que batió con todos los pronósticos, Juan Carlos Alderete, director ejecutivo de análisis del grupo financiero Banorte, no obstante, prevé que la economía podría presentar un progreso moderado con base en un segundo trimestre mejor a lo esperado, tanto en la parte industrial como en los servicios.

Según Alderete esto compensaría las señales adelantadas del tercer trimestre, que apuntan claramente a una desaceleración.

Mendoza, Arias y Ostolaza anticiparon que el PIB del tercer trimestre del año resentiría una contracción de 0.2% a tasa trimestral; “seguimos proyectando un crecimiento del PIB de 0.4% para 2025 y de 1.5% para 2026, por lo que acumularía tres años consecutivos por debajo de su promedio de largo plazo de 2.0%”, agregaron.

El consenso de 38 analistas que participaron ayer en la encuesta de Citi México de expectativas mantuvo en 0.5% el avance del PIB de este año, con un rango que oscila desde una tasa negativa de 0.1%, hasta una positiva con un avance de 0.8%. Para 2026, sin embargo, redujeron marginalmente la proyección, de 1.4% a 1.3%.

De acuerdo con el mismo ejercicio, el mayor banco del Sistema, BBVA México, estima que la economía nacional avanzará este año a un ritmo de 0.7%. Banorte, el tercer banco en relevancia en términos de activos y cartera crediticia reafirmó el martes su expectativa de crecimientos de 0.5%.

“Profundizando en el cierre del año, confiamos en que los fundamentales de consumo jugarán un papel clave, especialmente porque los servicios se perfilan como el sector más dinámico de la economía en esos últimos meses”, agregó Alderete.

Contrastes

En el desglose mensual por grandes grupos de actividad, las actividades primarias, que descendieron 3.01%, fueron las que resintieron el mayor impacto.

El Sector de la Transformación e Industrial, que se contrajo 1.16%, reflejó las caídas en construcción, de 1.18%; en las industrias manufactureras, de 1.61%, y en los servicios públicos, de 09%. En sentido contrario, en este grupo, destacó el avance de la minería, de casi 2.0% (1.89%) con su mayor tasa desde agosto del 2023.

Los números del Sector Servicios, que mostraron un ajuste en el mes de 0.37%, por su parte, arrojaron caídas tanto en el comercio al menudeo, de 0.42%, como en el comercio al por mayor, de 0.28%.

Corrieron con la misma suerte las actividades de transporte, correos y almacenamiento, que descendieron 1.00%; los servicios de esparcimiento y recreativos, de 1.10%, así como los servicios de alojamiento temporal y preparación de alimentos y bebidas, de 1.30%.

En este mismo grupo, sin embargo, destacaron los crecimientos de los servicios profesionales, científicos y técnicos, de 1.61%, y los servicios de salud y asistencia social, de 1.25%.

Frente a la medición anual, las actividades secundarias, que cayeron 2.78%, exhibieron los retrocesos en la construcción, de 4.09% anual y la minería, de 5.93%. Las industrias manufactureras se contrajeron a un paso de 1.80%, su mayor caída desde septiembre del 2020.

El Sector de los Servicios, que subió 0.42% anual, reflejó los avances de dos dígitos en los servicios profesionales, científicos y técnicos, a tasas de 12.73% y en los servicios de apoyo a los negocios, de 17.00%.

Aumentaron a un menor ritmo los servicios de salud, en 6.72%; el comercio al por menor, en 4.40%, y los servicios de esparcimiento y recreativos, en 2.83%.