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El financiamiento del nuevo fondo incrementa la exposición del Sector a riesgos relacionados con el petróleo, que siempre ha sido más del triple respecto al de la banca comercial que opera en México. En junio de este año, antes del anuncio, Pemex ya representaba el 24% del capital común tangible (CCT) de Nafin, y el 8% del de Bancomext
La calificadora internacional Moody´s Ratings alertó en un documento distribuido el lunes que un nuevo vehículo de inversión millonario destinado a financiar proyectos estratégicos de Petróleos Mexicanos (Pemex) y que liderará el banco de desarrollo más grande del país, el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), incrementará los riesgos del Sector en su conjunto vinculados con el petróleo.
En contraste, el esquema liberará la carga a la banca comercial, con un enfoque “tradicionalmente cauteloso” hacia la problemática petrolera y la producción de petróleo en México, “ya que los bancos buscan limitar riesgos, prestando a las entidades o proyectos más sólidos financieramente”.
El financiamiento del nuevo fondo incrementará en cambio la exposición de la banca de desarrollo del país a los riesgos relacionados con el petróleo, incluyendo a Nacional Financiera (Nafin) y el Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext), tipificadas como sociedades nacionales de crédito.
La agencia de riesgos crediticios no tiene un monitoreo sobre Bancomext y sostiene hasta hoy la calificación de “Baa2” con Perspectiva Negativa tanto para Nafin como para Bancomext.
El 5 de agosto, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) anunció la creación de un nuevo vehículo de inversión por 250 mil millones de pesos (mdp), cerca de 13,300 millones de dólares (mdd), con el fin de financiar proyectos estratégicos de Pemex, en un nivel de grado especulativo “B3” con Perspectiva Negativa por parte de Moody´s.
Banobras será el encargado de administrar el fondo, que será financiado en su conjunto por la banca de desarrollo, una participación minoritaria de los bancos comerciales, por inversionistas privados y por el sindicato de la petrolera. El fondo estará respaldado por garantías federales y se asignará exclusivamente a proyectos de inversión en producción de la empresa durante este año.
La iniciativa forma parte del Plan Estratégico 2025-2035 de Pemex, que hoy enfrenta presiones financieras, altos requerimientos de liquidez y un flujo de efectivo libre negativo continuo, agregó Moody´s.
Según el reporte financiero del segundo trimestre de la petrolera, su deuda total ascendía al corte de esa fecha a 98,786 mdd, lo que la convertía en la empresa petrolera estatal más endeudada del mundo. Sus vencimientos denominados en dólares para 2025 ascienden a 2,218 mdd, mientras que para 2026 y 2027 son mayores, por 3,256 mdd y 4,395 mdd respectivamente.
A esto se añaden los vencimientos en otras monedas diferentes al dólar, que para este mismo año tienen un costo por el equivalente en dólares de 14,727 mdd; para 2026, de 7,824 mdd, y para 2027 de 12,106 mdd.
Las líneas de crédito recientemente extendidas y respaldadas por garantías federales, buscan aliviar esta presión y respaldar las inversiones de Pemex, principalmente en las labores de exploración y producción (E&P).
Petrolizar las finanzas
El documento de análisis de Moody´s Ratings firmado por Felipe Carvallo, jefe de crédito y senior vicepresident de la agencia y su equipo, anota que los bancos de desarrollo en particular han seguido de cerca límites regulatorios de exposición que restringen los préstamos a una sola entidad estatal (SOE, por sus siglas en inglés), a un máximo de 1 vez del capital nivel 1.
Aunque los bancos de desarrollo suelen operar muy por debajo de este límite, los bancos comerciales han sido todavía más conservadores, anotó Carvallo, limitando típicamente su exposición a las SOE a la mitad, esto es, a alrededor de 0.5 veces del capital de nivel 1.
Como la empresa más grande de México y un prestatario importante con persistentes necesidades de liquidez, de hecho, Pemex ya representa una importante exposición crediticia directa tanto para la banca comercial como para la de desarrollo, resaltó la agencia.
En junio de 2025, Pemex representaba ya el 24% del capital común tangible (CCT) de Nafin y el 8% del de Bancomext. Mientras tanto, la exposición directa a Pemex entre la banca comercial varía y se ha mantenido estable desde el 2023, en aproximadamente el 9% de su capital común tangible.
“Si asumimos el monto total, que aún está sujeto a negociaciones entre Pemex y sus deudores, estos nuevos fondos garantizados representarían alrededor del 70% del CCT de la banca de desarrollo y alrededor del 10% del CCT de la banca comercial”, indicó Carvallo.