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El Secretario de Estado de Donald Trump vuelve al ataque contra esos tres países y los señala como dictaduras. Además aseguró que los problemas migratorios se dieron por la forma de gobernar que tuvieron durante años…
A Estados Unidos se le abrió otro foco de conflicto. En medio de la tensión con Canadá, México, Brasil y China, el Secretario de Estado de Donald Trump, Marco Rubio decidió declararle la guerra a otros tres países: Venezuela, Cuba y Nicaragua. “Estos tres regímenes que existen, Nicaragua, Venezuela y Cuba, son enemigos de la humanidad y han creado una crisis migratoria. Si no fuera por esos tres regímenes, no habría una crisis migratoria en el hemisferio”, lanzó Marco Rubio durante una conferencia de prensa en el marco de su visita a Costa Rica.
Empezando por Cuba, Marco Rubio no se guardó nada: “No tengo ninguna intención de ir a La Habana con este régimen en el poder, salvo para hablar de cuándo se marcharán. Ese régimen es un desastre, Díaz Canel ha destruido el país. Es un régimen hostil a los Estados Unidos”.
Luego de ello, apuntó contra Nicaragua: “Hoy en día hay que reconocer que Nicaragua no es una democracia, no funciona como la democracia. El binomio Ortega-Murillo castiga a todo quien amenaza su poder. Miles de personas huyen de ese sistema. Nicaragua se ha convertido en una dinastía de familia con una copresidencia donde básicamente han tratado de eliminar a la Iglesia católica y todo lo religioso y todo lo que pueda amenazar el poder a ese régimen. Es la misma razón por la que están huyendo de Cuba, la misma razón (por la) que están huyendo de Venezuela…”.
Por último, se desquitó contra Venezuela y Nicolás Maduro: “No voy a hablar sobre cuáles son las acciones pero él sabe, y ellos saben, que tenemos muchas opciones para infligir daño y perjuicio graves al régimen de Maduro. Los líderes como Maduro, sin importar lo duros que intenten ser, respetan a Donald Trump. Saben que no es del tipo que enviará cartas con palabras energéticas; tomará medidas de fuerza…”.
Como era lógico, las respuesta no tardaron en llegar y fueron del mismo peso que sus palabras. El primero en levantar la voz fue Díaz Canel, Presidente de Cuba: “La desvergüenza una vez más apoderándose de los políticos cínicos de EE.UU. Está probado que el éxodo migratorio en Cuba es proporcional al endurecimiento del bloqueo, que priva a nuestro pueblo de los bienes esenciales. La humanidad peligra por el neofascismo de ustedes. Marco Rubio no podrá conocer Cuba, país del que no sabe absolutamente nada. No fue invitado. El imperio estadounidense daña a la sociedad…”.
Desde Venezuela también llegó otro bombazo dialéctico. El líder de Relaciones de Exteriores de Venezuela, Yván Gil, salió al cruce en Telegram y manifestó: “Parece que no puede dormir sin pensar en Cuba, Nicaragua y Venezuela. Cuba, Nicaragua y Venezuela han demostrado que no se doblegan, que no se venden, que no claudican. Se enoja porque son países que no pueden derrotar. Es un obsesionado patético”.
Está claro que Estados Unidos tiene una estrategia bien definida y posiblemente, luego de solucionar sus problemas con México y Canadá. Trump irá por estos tres países. Esta historia recién comienza, como el gobierno del republicano…
