Y Donald Trump da el golpe: Groenlandia acepta negociar con Estados Unidos

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En una respuesta absolutamente inesperada, Groenlandia da luz verde a una posible negociación con Estados Unidos. Los habitantes quieren separarse de Dinamarca. Explicaciones, trasfondo y consecuencias de una historia que acaba de comenzar y puede cambiar el mundo geopolítico…

“Por motivos de seguridad nacional y libertad en todo el Mundo, Estados Unidos de América considera que la propiedad y el control de Groenlandia son una necesidad absoluta”, anunció Trump en un acto en el que también nombró a su embajador en Dinamarca, Ken Howery.

Hoy en día, Groenlandia cuenta con más de 800,000 millas cuadradas, siendo una isla más grande que México y con recursos naturales que incluyen petróleo y minerales de tierras raras como neodimio y disprosio. De acuerdo a la visión de Donald Trump, Rusia considera que Groenlandia es un punto estratégico clave en el mundo y no quieren que su influencia se instale en esa zona. Además, de eso, Groenlandia no ha explotado sus recursos naturales de la mejor forma. Un estudio reciente del Servicio Geológico de Dinamarca y Groenlandia proyecta que hay 18.000 millones de barriles de petróleo sin descubrir en Groenlandia, e infinidad de metros cúbicos de gas natural.

En ese contexto, lo que nadie esperaba era el giro radical de el Primer Ministro de Groenlandia, Múte Egede. En un principio, el mandatario expresó: “Groenlandia es nuestra. No estamos, y nunca estaremos, a la venta. No perderemos nuestra larga lucha por la libertad…”. Ahora la historia es distinta porque Egede está dispuesto a negociar con Estados Unidos porque los habitantes de Groenlandia se sienten abandonados por Dinamarca.

“Estamos dispuestos a hablar. La cooperación se basa en el diálogo y en la búsqueda conjunta de soluciones. Tenemos un deseo de independencia, un deseo de ser dueños de nuestra propia casa. Esto es algo que todos deberían respetar. Groenlandia es para el pueblo groenlandés. No queremos ser daneses ni estadounidenses. Queremos ser groenlandeses…”, comenzó marcando Egede en una conferencia de prensa realizada en Nuuk, capital de Groenlandia.

“La realidad es que vamos a trabajar con Estados Unidos, ayer, hoy y mañana. Tenemos que ser muy inteligentes en cómo actuamos. Las luchas de poder entre las superpotencias están aumentando. Tenemos que negociar con Estados Unidos. Hemos iniciado un diálogo y empezado a explorar las posibilidades para cooperar con el presidente electo (Donald Trump)…”, sentenció Egede.

Por su parte, el vicepresidente electo de Estados Unidos, JD Vance, escuchó estas declaraciones y respondió en Fox News: “Groenlandia es muy importante para Estados Unidos desde el punto de vista estratégico. Tiene una gran cantidad de recursos naturales. Creo que aquí tenemos una oportunidad real de asumir el liderazgo”.

La información que surge desde el arco político local es que los habitantes de Groenlandia están dispuestos a buscar su independencia y luego hacer un referéndum para decidir pertenecer a Estados Unidos, algo que en encuestas daría positivo. Dichas encuestas se basan en que hay un 80 por ciento de la población que se destaca por ser tradicionalista y estaría en desacuerdo con las políticas europeas admitidas por Dinamarca.

Los habitantes de Groenlandia consideran que unirse a Estados Unidos no solo les daría autonomía, sino una fuerte alianza económica y militar. Este movimiento podría reconfigurar las relaciones geopolíticas en el Ártico. Para Trump, esto ya es una avance contundente…