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#AlAire
Es un éxito. Es histórico. Las cifras fueron espectaculares. Fue un proceso sorprendente. Así brotaron los adjetivos felices lanzados esta mañana desde Palacio Nacional tras la inscripción de 18 mil 447 personas ante el comité designado por Claudia Sheinbaum para registrar y evaluar a quienes desean competir por los cargos judiciales que estarán en juego el domingo 1 de junio de 2025 en votación popular.
Por Enrique Hernández Alcázar
Y cómo no van a estar contentos, si hace apenas cinco días se reportaban apenas mil personas inscritas ante el Comité de Evaluación del Poder Ejecutivo Federal. Pero el domingo fue de resurrección del proceso con más de 8 mil registros. Me lo dijo Arturo Zaldívar en la radio: “los mexicanos solemos dejar para el último momento los trámites burocráticos”.
No hubo futbol, ni carnita asada, ni cruda alguna que frenara el fervor de las abogadas y los abogados mexicanos para sentarse frente a sus computadoras en sesión dominical y reafirmar su voluntad democrática para cargar sus PDFs y llenar sus formularios electrónicos y quedar registrados como aspirantes a magistradas, magistrados, juezas, jueces, ministras o ministros en el Poder Judicial.
También se mostró victorioso el Comité de Evaluación del Poder Legislativo que informó que obtuvo 11 mil 904 solicitantes que completaron este proceso. Lo extraño es que tuvo que abrir dos correos electrónicos institucionales para atender la demanda que sobrepasó al ‘micrositio’ de los registros, por lo que -de manera extraordinaria- también recibieron 14 mil 979 solicitudes vía correo electrónico que estarán sujetos a revisión.
El patito feo del épico cierre dominical de las inscripciones fue el Comité de Evaluación del Poder Judicial. Sí, el único de los Poderes de la Unión en el que hubo un abierto y mayoritario rechazo a la reforma judicial de AMLO. Quizá por esa razón solo se registraron poco más de 3 mil 460 aspirantes. Muy lejos de la meta de 5 mil 410 inscripciones por cada comité.
Así, Morena domina el país. En el Legislativo, en el Ejecutivo y en la narrativa mediática. Tiene en sus manos el registro, el filtro, la decisión y el resultado de esta polémica elección judicial. Ya pasó lo más árido: lo burocrático, lo electrónico y lo digital de llenar formatos y vaciar registros. Ahora hará lo político: seleccionar con sus pinzas guindas la idoneidad de quienes aparecerán en las boletas. Tienen manga ancha.
Y, por cierto, también domina al INE, a quien le aplicó una llave muy difícil de librar. Guadalupe Taddei, consejera electoral que preside al organizador y árbitro de la elección judicial, ya recibió dos taches en su cartita a Santa Clós. Taddei pidió dos cosas en los últimos días: tener un presupuesto de 13 mil millones de pesos y 90 días de prórroga para poder llevar a cabo la elección judicial. Y en ambos casos la batearon.
“Tienen los tiempos cortos pero es factible llevar a cabo la elección”, sentenció la presidenta Sheibaum esta mañana de lunes. Así que el INE va a tener que organizar, arbitrar y escrutar la elección de personas juzgadoras del Poder Judicial con lo que tiene. Con lo que le den. Haiga sido como haiga sido.
¿Pué quede malir sal?
