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A horas del comienzo de la elección histórica para Presidente de los Estados Unidos, Kamala Harris recibe un golpe letal por parte de una encuestadora infalible…
En 2016 fueron los primeros en pronosticar el triunfo de Donald Trump. En 2020 fueron los primeros en marcar que Joe Biden derrotaba a Trump. Y ahora, luego de un relevamiento profundo y detallado, la consultora Geiger Capital pronostica una victoria de Trump con 297 votos electorales frente a los 241 de Kamala Harris en estas elecciones presidenciales.
La realidad es que Geiger Capital se ha convertido en una de las encuestadoras más importantes de Estados Unidos tras acertar y avisar del desenlace electoral de la últimas dos votaciones presidenciales. Lógicamente este informe panorámico de la votación agregó tensión a la definición ya que anuncia un triunfo contundente de Trump en estados que son claves. Gran parte de las encuestadoras aseguraban que la elección debería ser apretada, con muchos estados indecisos o de empate técnico, sin embargo, Geiger Capital tiene otra estadística.
Según Geiger, Trump tiene una categórica ventaja en Arizona, Nevada y Carolina del Norte, con márgenes de 6,5, 5,5 y 3 puntos, respectivamente. En Georgia, lidera por 2,5 puntos, mientras que en estados más competitivos, como Pensilvania, Michigan y Wisconsin, el margen es menor pero favorable para el republicano.
Lo más relevante para Geiger Capital es que hay un sorprendente crecimiento para Trump entre los hispanos en Arizona y Nevada, y entre los votantes negros en Wisconsin, con énfasis en una ventaja del 65 por ciento entre los negros en este último estado, algo que se ve claramente influido por por temas económicos y de seguridad.
“Lanzaré el programa de deportación más grande en la historia de Estados Unidos. Rescataré cada ciudad y pueblo que haya sido invadido y conquistado. Estas ciudades han sido invadidas y conquistadas de la misma manera que una invasión militar, excepto que no llevan uniforme”, expresó Donald Trump en su discurso final.
Kamala Harris también dio sus últimas palabras y decidió que fueran un ataque directo a su rival electoral: “Prometo buscar los puntos comunes y encontrar soluciones de sentido común para los retos que enfrentamos. Se trata de una persona cada vez más inestable, obsesionada con la venganza, consumida por el resentimiento, y que busca un poder sin límites”. Lo cierto es que el futuro cercano de Estados Unidos se define en horas: la decisión está en las manos de la sociedad…
