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Al recibir la constancia de presidente electa, Claudia Sheinbaum dio un guiño a los magistrados que decidirán la sobrerepresentación de Morena en el Congreso.
“Es la primera vez, en 200 años de la República, que recibe el reconocimiento de presidenta electa una mujer… presidenta, con a”.
Con estas palabras, Claudia Sheinbaum Pardo recibió la constancia que la acredita, ahora sí, como presidente electa de los Estados Unidos Mexicanos.
Una sesión, cabe señalar, rebosante en halagos y referencias feministas.
“Como lo he dicho en otras ocasiones, no lo asumo solo como un triunfo individual, como el esfuerzo personal. El día de hoy, marcado ya en la historia de México, no llego sola; llegamos todas”, insistió.
“Me comprometo a luchar —agregó— a seguir construyendo igualdad y libertad para todas las mujeres mexicanas; en especial, a las más vulnerables. De cuidar, como lo hacemos las mujeres, responsablemente, el porvenir de nuestra patria”.
Eso sí, Claudia Sheinbaum no desaprovechó la oportunidad de dar un guiño a los mismos magistrados que habrán de decidir la polémica sobrerepresentación para Morena y sus aliados, que les abriría la posibilidad de contar con una mayoría calificada y cambiar la Constitución.
“El 2 de junio, el pueblo de México también plasmó su voluntad para la composición del Congreso de la Unión y es clara la norma electoral en la asignación de la representación electoral”, sostuvo.
“Estoy convencida —advirtió— de que las y los titulares del Poder Judicial en materia electoral conocen a profundidad este tema porque así han actuado en pasadas elecciones y sabrán respetar también la Constitución, las leyes y la voluntad del pueblo”.
“¿ES TIEMPO DE MUJERES?”
Momentos antes, la magistrada presidente del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Mónica Soto, había comenzado con los halagos y las referencias feministas.
“México ha roto el techo de cristal”, dijo al abrir su discurso sesión solemne.
“Primera mujer en asumir el mandato supremo de nuestra República, después de 200 años y 65 hombres en el cargo”, agregó.
“En usted —continuó— se refleja el avance sustantivo de las mujeres mexicanas y, en su presidencia, se encarnan las aspiraciones de libertad y progreso del estado de derecho y la igualdad plena”.
“Se eligió democráticamente a la primera presidenta de México y, con ello, este capítulo se inscribe en la historia no solo de nuestro país sino de la lucha feminista global… y me pregunto: ¿es tiempo de mujeres?”, concluyó.
