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Será esta semana cuando la Secretaría de Economía reporte en las cifras de la Inversión Extranjera Directa (IED) el cambio contable derivado de la adquisición de la inversión en las plantas de generación de electricidad cuya propiedad se adquirió a la firma española Iberdrola.
Por ello, el monto de la IED mostrará un ajuste de al menos 6,000 millones de dólares, con lo que la cifra de inversión por parte de empresas extrajeras exhibirá una comparación negativa con la cifra previa de este indicador.
En el reporte de Banco de México correspondiente a la Balanza de Pagos para el primer trimestre de 2024, el Instituto Central explicó que en el periodo enero-marzo de 2024, Iberdrola España concretó la venta de 13 plantas eléctricas en México a la empresa Mexico Infrastructure Partners (MIP), residente en México, por un monto aproximado de 6,200 millones de dólares.
Esta operación de desinversión en México, publicó el Banco de México el pasado 24 de mayo, aún no se encontraba reflejada en la estadística de inversión directa en el país, toda vez que al cierre del primer trimestre no había sido reportada al Registro Nacional de Inversiones Extranjeras (RNIE) de la Secretaría de Economía.
Banxico explicó que, al considerar dicha estimación de la transacción, la inversión directa habría exhibido un endeudamiento neto de 12,955 millones de dólares, en lugar del reportado de 19,155 millones de dólares.
Así, la cuenta financiera habría presentado un endeudamiento neto de 14,156 millones de dólares, en lugar del de 20,356 millones de dólares, y el renglón de errores y omisiones habría resultado en un flujo negativo de 1,562 millones de dólares. Las cifras correspondientes al primer trimestre se revisarán conforme se disponga de mayor información.
Y será precisamente entre el 14 y el 15 de mayo cuando la Secretaría de Economía dé a conocer la cifra al segundo semestre para la IED cuando se reporte esta aparente caída en lo que se llama “flujo de inversión extranjera directa”.
Sin embargo, ese flujo, el endeudamiento neto que representa para las cuentas del país la IED, no disminuyó sino que se transfirió a la una empresa mexicana que opera esa infraestructura junto con la Comisión Federal de Electricidad.
La inversión no se fue, explicó Jorge Flores Kelly, sino es un cambio de manos, a manos nacionales.
“Los activos siguen existiendo y produciendo para el país”, indicó Flores Kelly.
No impacta la capacidad del país para atraer inversión extranjera y no hay una disminución en la inversión en la capacidad productiva del país, agregó el fundador de Observatorio Nearshoring y de Datamétrica Aporta.
Es importante recordar, una vez más, que el rubro de Inversión Extranjera Directa tiene ciertas limitaciones para reportar la naturaleza de las inversiones y el caso de la compra de las plantas de Iberdrola es un claro ejemplo.
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