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Latinoamérica queda expectante a lo que serán las elecciones de Venezuela. Se espera que millones de venezolanos se acerquen a votar y definir el futuro del país en unas elección histórica…
Nadie está exento, la repercusión será mundial porque puede ser el final de un ciclo. Venezuela tendrá elecciones presidenciales el próximo 28 de julio y se espera una ola de votantes que decidirán el futuro a corto plazo del país. Si bien el foco está puesto en Venezuela, la realidad es que Latinoamérica está pendiente de semejante definición y con el correr de las horas, la tensión va en aumento.
Lula Da Silva, presidente de Brasil, dialogó con agencias internacionales de noticias y confesó: “Le he dicho a Maduro que la única posibilidad de que Venezuela vuelva a la normalidad es que haya un proceso electoral ampliamente respetado. Espero que esto ocurra por el bien de Venezuela, por el bien de Sudamérica. Si Maduro quiere contribuir a resolver el retorno del crecimiento en Venezuela, el retorno de la gente que se fue de Venezuela y establecer un estado de crecimiento económico, tiene que respetar el proceso democrático”.
Las palabras de Lula instalaron una incertidumbre gigante en el pueblo venezolano porque prácticamente pronóstico una derrota de Nicolás Maduro. La respuesta del mandatario venezolano no tardó en llegar y fue la más dura de todas: “El 28 de julio, si no quieren que Venezuela caiga en un baño de sangre, en una guerra civil fratricida producto de los fascistas, garanticemos el más grande éxito, la más grande victoria de la historia electoral de nuestro pueblo”.
“El 28 de julio se decide guerra o paz, guarimba (protesta violenta) o tranquilidad, proyecto de patria o colonia, democracia o fascismo. ¿Están preparados? ¿Están preparadas? Yo estoy preparado, tengo el amor por Venezuela, tengo la experiencia, no le tengo miedo ni al demonio, Dios viene conmigo, Dios con nosotros, el pueblo con nosotros”, sentenció el candidato oficialista.
Por su parte, el jefe de campaña de Nicolás Maduro, Jorge Rodríguez, afirmó desconocer las declaraciones del presidente brasileño: “No he leído lo que ha dicho Lula, pero ¿cómo no vamos a respetar los resultados si vamos a ganar? Maduro va a celebrar los resultados junto a su pueblo”.
La particularidad es que a días de las elecciones en Venezuela, dos encuestas dan una amplia ventaja a Edmundo González con cerca del 60 por ciento de los votos, lo que sería una derrota demoledora para Maduro. “Me asustaron los comentarios de Maduro de que Venezuela podría enfrentar un baño de sangre si pierde. Maduro necesita aprender que cuando ganas, te quedas; cuando pierdes, te vas. Cuando a un dirigente se le pone en la cabeza que él es imprescindible o insustituible, ahí es que comienza a nacer el espíritu del dictador”, sentenció Lula de su parte.
De esta forma, la tensión por el desenlace venezolano crece con el paso de los días. La expectativa pasa por ver a un Maduro derrotado, aunque para muchos, ese puede ser el contexto más peligroso para Venezuela…
