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La tecnología ya alcanzó la contabilidad, ¿sabes cómo ha renovado los métodos tradicionales? Acompáñanos para saberlo.
Hay que reconocer que la tecnología, en general, se ha involucrado en nuestra vida cotidiana para hacerla más llevadera, aunque no siempre es tan fácil integrarla y abandonar los viejos hábitos.
El ámbito de la contabilidad no se ha quedado atrás en cuanto a innovación se refiere, muchas personas se han visto beneficiadas por las herramientas nacidas en años recientes; el problema es que no todos piensan lo mismo y se siguen aferrando a procedimientos que, en la actualidad, ya no resultan tan prácticos.
¿Cuáles son los puntos en los que chocan la contabilidad electrónica y la tradicional? Vamos a revisarlos uno por uno.
Lo accesible vs lo complejo
Hoy en día, un trabajador independiente, por ejemplo, es capaz de llevar un control de sus finanzas gracias a un software de contabilidad. Antes, se recurría principalmente a un contador debido a la poca familiaridad que había con el tema, el cual, a la fecha, sigue considerándose un tanto complicado.
Desde esta perspectiva, la tecnología se ha encargado de hacer más comprensibles ciertos conceptos, así como de simplificar tareas, optimizarlas y conseguir que se apeguen a los lineamientos del SAT, algo que dos décadas atrás habría sido inimaginable.
Y sí, es verdad que ni siquiera en los tiempos que corren la gente podría autodenominarse experta para facturar, pero al menos no sienten que sea una cosa que nunca lograrán aprender.
Lo automático vs lo manual
En el campo de lo contable, era usual que todo movimiento se anotara en papel y a mano, dando pie a errores humanos, retrasos y cansancio. La llegada de la tecnología le ha dado un giro de 180° a este método.
¿Las razones? Para empezar, hay plataformas disponibles que, al alimentarlas con información, son capaces de autocompletar documentos y facturas en segundos con un bajo margen de error. Así pues, aquello que se realizaba de manera manual y llevaba cierto tiempo finalizarlo, ahora es automático; los usuarios ya no tienen que pasar por la pesadilla de quehaceres repetitivos ni manos acalambradas.
Lo físico vs lo digital
Imagínate esto: para finalizar un trámite, te han solicitado un documento que solo tienes en físico, pero no recuerdas en qué caja de archivo lo has guardado, o sea, tu única opción es la de buscarlo entre un millar de papeles. La solución es impráctica, representa una pérdida de tiempo y de los recursos que se invierten en papelería.
Alojar la información en un software o en una nube, permite a las personas un rápido acceso a la misma desde cualquier lugar y a la hora que sea, de tal forma que el envío de contabilidad electrónica se ejecute ágilmente para prevenir sanciones o multas que bien se hubieran podido prevenir.
Lo arriesgado vs lo seguro
Ahora ponte en una situación en la que debas enfrentar el daño de un documento por un accidente como una inundación, un incendio o un descuido humano. Dependiendo de su naturaleza, sería un problema volver a restablecerlo, además de que te quitaría tiempo.
Por otro lado, si bien se procura que esos papeles estén bien resguardados, se les tiene que brindar cuanta protección sea posible para impedir su robo o que alguien utilice los datos expuestos en la documentación para fines desconocidos.
Ahí radican las principales desventajas de conservar un archivo físico, con uno de los programas de contabilidad ofrecidos por las nuevas tecnologías, la angustia de que se puedan presentar casos como los antes mencionados, se erradica por completo. Gracias a los respaldos y a los múltiples escudos de estas herramientas, puedes confiar en que tu información se mantendrá intacta y segura.
Para ti, ¿quién ganó?
La exigencia por optimizar métodos, proviene del ritmo actual del mundo, pues completar actividades de modo eficaz y en el menor tiempo, es lo ideal. En el aspecto contable no es diferente, pues los usuarios buscan soluciones que los ayuden a tener un excelente control de sus finanzas y de sus obligaciones fiscales.
Por supuesto, cada quien es libre de decidir los métodos que más se acoplen a sus necesidades mientras se tenga una noción de otras alternativas existentes.
