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Maduro ignora el ultimátum y las amenazas de Donald Trump y busca salir de Venezuela de la forma que sea. La historia ingresa en su etapa más decisiva y tensa…
Hace unos días, las versiones que surgieron desde Estados Unidos era que Nicolás Maduro estaba negociando exiliarse en Turquía por su relación estrecha con Erdogan. Sin embargo, eso no estaría cerca de concretarse porque el líder venezolano estaría pactando su salida de Venezuela al país menos pensado: Qatar.
Nicolás Maduro está en su peor momento interno
Según informa el medio New York Post, Nicolás Maduro solo busca conseguir tiempo para llegar a un acuerdo con los altos mandos, que están dispuestos a darle exilio político con su familia y en principio, tendría la aceptación de Estados Unidos. Por lo que se pudo saber, Maduro está en su peor momento interno: el militar desconfía de todos los que lo rodean, rota constantemente el lugar dónde duerme, cambia de teléfonos diariamente y refuerza su seguridad con cubanos. En el mientras tanto, intenta asegurar su salida antes de que Estados Unidos ejecute una acción militar.
La condición fundamental para que Estados Unidos deje a Maduro volar a Qatar es que ceda todo el poder por completo en el arco político venezolano. El objetivo de Trump es volver a tomar el control de Venezuela con Maduro fuera del país y cortando el alcance que pueda llegar a tener a distancia.
En la última semana, Trump y Maduro tuvieron un contacto formal, pero todo acabó de la peor forma porque las exigencias del venezolano fueron extremas: una amnistía internacional para todos sus crímenes y mantener el control de las fuerzas armadas venezolanas. No obstante, lo que más sorprendió a Trump fue que esas condiciones impuestas por Maduro no eran para entregar el poder, sino para realizar unas elecciones libres, algo imposible de ejecutar en la Venezuela actual.
Qatar ha intentado ubicarse como mediador
Desde hace meses, Qatar ha intentado ubicarse como mediador del conflicto entre Estados Unidos y Venezuela, aunque en un principio, Trump decidió dejar a los qataríes a un lado de este desencuentro geopolítico. “A Qatar, Arabia Saudita y Emiratos les encanta involucrarse en este tipo de acuerdos porque fortalece su relación con Estados Unidos. Compiten entre ellos y por el favor de Washington”, indicó una fuente cercana a la administración al medio citado anteriormente.
En este contexto, Maduro se encontró con un daño colateral por esta postura desafiante contra Estados Unidos: los expertos aseguran que China y Rusia carecen de la voluntad de desafiar directamente a Trump en su propio hemisferio. En Washington saben que Rusia todavía está sumida en su guerra en Ucrania y no espera que se involucre en este conflicto con negociaciones avanzadas por la paz. Además se espera que China, a pesar de años de profunda colaboración económica con Caracas, se abstenga de intervenir militarmente.
Por lo pronto, Maduro sigue en el poder de Venezuela y Trump presiona al máximo, quedando al borde de un ataque militar. Para el líder venezolano, la situación es crítica y ha llegado el momento de tomar decisiones profundas: combatir contra Estados Unidos o escaparse y cede el poder…
