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En un país donde abrir una empresa digital toma menos de 24 horas, doce emprendedores de México, Chile y Costa Rica vivieron una experiencia única: la edición 2025 de Zero to Founder – Estonia Edition, un programa que fusiona diplomacia, tecnología y emprendimiento bajo una misma premisa: formar fundadores globales.
Durante 17 días de inmersión en Estonia, Finlandia y Suecia, los participantes exploraron de cerca los ecosistemas nórdicos de innovación. Desde los pasillos del e-Estonia Briefing Center, donde se diseñó la identidad digital estatal, hasta los coworkings donde nacieron unicornios como Wise y Bolt, la delegación vivió una agenda intensa que combinó aprendizaje técnico, mentorías estratégicas y encuentros con inversionistas, diplomáticos y líderes tecnológicos.
El programa fue liderado por Rocket-U, en colaboración con Enterprise Estonia, Startup Estonia, Work in Estonia, e-Residency, Scientika y la Embajada de México en Suecia, encabezada por el embajador Alejandro Alday González.
Los doce participantes —innovadores sociales, fundadores tecnológicos y académicos— fueron seleccionados por su potencial de escalar sus proyectos hacia el mercado europeo.
“Zero to Founder no solo nos conectó con Europa, nos conectó con la versión más valiente y global de nosotros mismos”, compartió Ashlee Sosa, emprendedora mexicana.
Uno de los hitos más relevantes del programa fue que todos los integrantes obtuvieron la e-Residency de Estonia, un programa gubernamental que otorga identidad digital válida en la Unión Europea. Con ella, los emprendedores ya pueden crear y gestionar empresas 100% digitales desde cualquier parte del mundo, accediendo al marco jurídico y fiscal europeo.
El modelo estonio en cifras
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130,000 e-Residents en 170 países
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1,600 startups activas y 10 unicornios
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24 horas: tiempo promedio para abrir una empresa en línea
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99% de los servicios públicos digitalizados
Estos datos, presentados por Enterprise Estonia, muestran cómo una nación de apenas 1.3 millones de habitantes transformó su desarrollo al apostar por la digitalización. El llamado “efecto Skype”, tras el éxito global de la empresa fundada por estonios, continúa inspirando a nuevas generaciones de fundadores en todo el mundo.
Innovar con propósito: del software a la resiliencia
Entre las historias surgidas durante el programa destaca Not Toilet Paper (www.not-toiletpaper.com), la primera startup creada durante esta edición. Su modelo utiliza algoritmos para ayudar a las familias europeas a mantener reservas inteligentes de alimentos y medicinas, fortaleciendo la resiliencia doméstica frente a emergencias.
“El emprendimiento latinoamericano tiene talento y visión global. Podemos construir tecnología que aporte paz, resiliencia y colaboración en tiempos de incertidumbre”, señaló Luis Fernando Montes de Oca, fundador de Rocket-U y líder del programa.
La iniciativa se enmarca en la filosofía #TechForPeace, que promueve el uso de la innovación como herramienta de cooperación internacional.
Diplomacia y tecnología: un puente de futuro
El itinerario incluyó visitas a Wise, STING, Region Stockholm Innovation, Ülemiste Smart City, Helsinki Education Hub, y una jornada universitaria en Tartu, la capital académica de Estonia. Los participantes también recibieron mentorías de figuras como Kristofer Turmen, cofundador de la fintech Montonio, y Marcus von Euler, creador de Marshall Group, valuada en más de 1,100 millones de euros.
Más allá de los números, el programa dejó una lección profunda: la digitalización es tan humana como el propósito que la guía. Los emprendedores regresaron a Latinoamérica con una misión clara: traducir la visión nórdica en soluciones locales que impulsen sostenibilidad, educación y gobernanza digital.
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