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Arte comunitario que transforma espacios públicos e impulsa el desarrollo social y turístico
La Secretaría de Turismo (SECTUR) y la Alcaldía Milpa Alta pusieron en marcha el programa “La Lucha Tiene Color”, como parte de la estrategia nacional Rutas Mágicas de Color impulsada por el gobierno federal.
Esta acción conjunta busca revitalizar espacios públicos a través de murales y pintura de fachadas, promoviendo al mismo tiempo el sentido de pertenencia, la inclusión social y el orgullo local en las comunidades participantes.
Arte con propósito para fortalecer el tejido social
Durante el arranque oficial en Milpa Alta, el director general de Gestión Social de Destinos, Marte Luis Molina Orozco —en representación de la secretaria de Turismo, Josefina Rodríguez Zamora—, y el alcalde José Octavio Rivero Villaseñor, encabezaron el primer brochazo que dio inicio a las actividades. La estrategia cuenta con el respaldo de aliados clave como Comex y la asociación civil Corazón Urbano, quienes participan en la transformación visual de la demarcación.
Molina Orozco destacó que este programa va más allá del embellecimiento urbano al asegurar se trata de una herramienta de desarrollo integral que involucra activamente a vecinos, brigadas voluntarias y grupos en situación de vulnerabilidad para fomentar la cohesión social y dar voz a quienes tradicionalmente han sido excluidos. La entrega de materiales y equipo de pintura a la comunidad simboliza el compromiso colectivo con un entorno digno y vibrante.
La iniciativa también ha demostrado ser un motor para el turismo sostenible, al atraer visitantes, generar empleos y dinamizar los pequeños emprendimientos locales. En palabras de Molina, “Rutas Mágicas de Color no solo pinta calles, pinta futuro”; una apuesta por regenerar comunidades desde el arte y reforzar su confianza en el potencial transformador del trabajo conjunto.
Finalmente, SECTUR reiteró su invitación a otras localidades del país a sumarse a esta iniciativa, convencida de que el arte puede ser un puente para mejorar la calidad de vida y fortalecer la identidad colectiva. Con cada mural, México avanza hacia un modelo de desarrollo turístico más inclusivo, participativo y lleno de color.
