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Tras semanas en silencio, el presidente chino deja su postura frente a los aranceles comerciales de Donald Trump. China no se rinde y promete dar pelea hasta el final contra Estados Unidos.
“Veremos qué pasa con China. Nos encantaría llegar a un acuerdo. Tengo un gran respeto por el presidente (chino) Xi (Jinping). Ha sido, en el fondo, amigo mío desde hace mucho tiempo. Y creo que terminaremos logrando algo muy beneficioso para ambos países”, declaró Donald Trump en conferencia de prensa en las últimas horas. Sin embargo, la realidad marca otra historia y es que Estados Unidos elevó los aranceles a China hasta un 145 por ciento, siendo el más elevado del mundo.
En ese contexto y luego de varios días en silencio, Xi Jiping habló. El presidente chino estuvo presente en una reunión con Pedro Sánchez (España) y dejó sus primeras frases sobre lo sucedido en estos últimos días: “Solo mediante la unidad y la cooperación pueden los países mantener la paz y la estabilidad mundiales y promover el desarrollo y la prosperidad global. No hay ganadores en una guerra comercial”.
Además, Xi Jiping, delante de Pedro Sánchez, le pidió a Europa rechazar las medidas de Trump: “China y Europa tienen que protejer conjuntamente la tendencia a la globalización económica y oponerse a prácticas intimidatorias unilaterales. Sepan que el potencial de transformación industrial de los más de 1.400 millones de habitantes de China dará un fuerte impulso a la economía mundial”.
Por último, el líder chino le dejó un mensaje directo al republicano estadounidense: “Oponerse al resto del mundo significa aislarse. En los últimos 70 años, el desarrollo de China siempre se ha basado en la autosuficiencia y el trabajo duro. China nunca ha temido ninguna represión irracional. Este país mantendrá la confianza y la compostura y se concentrará en hacer bien su trabajo sin importar cómo cambie la coyuntura externa. China siempre defenderá la equidad, la justicia, las reglas y el orden internacional”.
Lógicamente, luego de estas palabras, el contacto oficial entre Trump y Xi Jiping parece imposible porque la tensión es muy grande y las medidas que se fueron tomando ya provocaron el daño. La última medida de China fue elevar los aranceles para Estados Unidos a un 125 por ciento, lo que volvió a provocar un movimiento negativo en el mercado.
“Pekín ha engañado desde hace décadas a la primera economía mundial. Se han aprovechado de nuestro país durante mucho tiempo. Nos han estafado más que nadie. Lo único que estamos haciendo es poner las cosas en orden”, sentenció Trump.
