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La presidenta Claudia Sheinbaum afirmó este viernes que la solidez del peso mexicano se debe a dos factores principales: la estrategia de mesura ante decisiones externas, como los posibles aranceles de Estados Unidos, y el modelo económico basado en el humanismo mexicano y la economía moral.
Según la mandataria, este enfoque ha permitido fortalecer el mercado interno y mejorar el bienestar social, lo que se refleja en la estabilidad de la moneda nacional.
Sheinbaum destacó que México, al contar con numerosos tratados de libre comercio, está directamente influenciado por decisiones económicas globales, particularmente las de Estados Unidos. En este contexto, señaló que su gobierno ha decidido actuar con cautela y esperar hasta el 2 de abril, cuando se anunciarán las tarifas recíprocas, antes de tomar medidas.
Mientras tanto, el nuevo secretario de Hacienda, Edgar Amador y el secretario Marcelo Ebrard han iniciado conversaciones con las autoridades estadounidenses para evaluar el impacto de estas decisiones y buscar un acuerdo beneficioso para México.
La presidenta reiteró que esta postura no implica debilidad, sino una estrategia para tomar decisiones con mayor información, asegurando la defensa de la soberanía nacional y la economía del país. En caso de que se apliquen nuevos aranceles, el gobierno responderá con medidas recíprocas, agregó.
Finalmente, Sheinbaum enfatizó que el modelo económico implementado desde 2018 seguirá vigente, pues considera que ha sido clave para la estabilidad del peso y el reconocimiento internacional de la economía mexicana.
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