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En las últimas horas, Trump llamó a la persona que Nicolás Maduro no quería. La presión es máxima y la historia ingresa en momentos delicados. El líder venezolano amenaza con una lucha armada…
“Le vamos a dejar de comprar petróleo. No necesitamos el petróleo de Venezuela, nosotros tenemos suficiente petróleo. Eso va a tener un gran impacto en Venezuela. Vamos a ver qué pasa con Venezuela. Estamos observando a Venezuela con mucha atención. Es un país que conozco muy bien por muchas razones y es un país maravilloso hace 20 años y ahora es un desastre”, fueron las palabras de Donald Trump sobre la situación en Venezuela, en su primera conferencia de prensa como presidente electo de los Estados Unidos.
Sin embargo, el accionar de Trump contra Maduro sigue avanzando y ahora dio un paso más que contundente: llamó a Bukele, presidente de El Salvador. En un comunicado presentado por la Casa Blanca, se informó: “Hoy, el presidente Donald Trump se comunicó telefónicamente con el presidente de la República de El Salvador, Nayib Bukele. Ambos líderes hablaron sobre la posibilidad de trabajar juntos para detener la inmigración ilegal y acabar con las bandas transnacionales como el Tren de Aragua. El presidente Trump también elogió el liderazgo del presidente Bukele en la región y el ejemplo que da a otras naciones del hemisferio occidental…”.
El punto está en la batalla contra El Tren de Aragua, que es considerada es una megabanda criminal venezolana originaria del estado Aragua y que controla todo el narcotráfico de la región. Según el organismo InSight Crime, El Tren de Aragua está presente en al menos seis estados venezolanos y en países como Brasil, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile, Estados Unidos y México, teniendo un importante incremento en sus actividades en el extranjero desde el año 2020.
Bukele y Trump habrían tenido una llamada de varios minutos, con un tono amistoso pero marcando los pasos a seguir. Bukele se impone naturalmente como un líder centroamericano y el republicano lo sabe. Por su parte, Maduro recibió esta noticia como un golpe potente ya que Bukele está dispuesto a todo y lo ha demostrado en El Salvador.
En un acto político, Maduro envió un mensaje contundente: “No estamos jugando. Nos estamos preparando, permanentemente, para la lucha armada en defensa de la democracia, de la paz, de la institucionalidad, de la estabilidad y del derecho al futuro de Venezuela. Nosotros ya tomamos más de 290 acciones de defensa territorial. Seremos inexpugnables para con las amenazas externas”.
Lógicamente, Bukele rechaza a Maduro como presidente electo venezolano, lo considera un dictador y señala que el presidente venezolano es Edmundo González. De hecho, Bukele rompió relaciones diplomáticas con Venezuela y avisó que solo se restaurarían en caso de que haya unas elecciones democráticas en el país.