ENFOQUE|| Sin notificar a CNBV, Salinas Pliego usó acciones como colateral para obtener liquidez y prestamista las rehipotecó

Para obtener recursos por 115 millones de dólares, Ricardo Salinas Pliego entregó en garantía acciones de Elektra con un valor de 400 millones de dólares, operación que concretó en julio de 2021 cuando los títulos de esta emisora registraron su valor máximo de los últimos cinco años en niveles de 1,600 pesos
Para obtener recursos por 115 millones de dólares, Ricardo Salinas Pliego entregó en garantía acciones de Elektra con un valor de 400 millones de dólares, operación que concretó en julio de 2021 cuando los títulos de esta emisora registraron su valor máximo de los últimos cinco años en niveles de 1,600 pesos

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Para obtener recursos por 115 millones de dólares, Ricardo Salinas Pliego entregó en garantía acciones de Elektra con un valor de 400 millones de dólares, operación que concretó en julio de 2021 cuando los títulos de esta emisora registraron su valor máximo de los últimos cinco años en niveles de 1,600 pesos. La operación, no obstante, resultó – según el fundador del Grupo Elektra– en una estafa que afecta a los inversionistas minoritarios, por lo que inició una demanda en tribunales de Nueva York y Londres.

Sin embargo, ante los mismos tribunales, se acusa al presidente de esta controladora de demandar medidas cautelares ante los para justificar la estrepitosa y repentina caída de las acciones, aseguran los prestamistas del presidente del Grupo Elektra ante un tribunal de Londres especializado en Negocios y Propiedad de Inglaterra y Gales, una jurisdicción especializada dentro de la División del Banco del Rey que maneja casos comerciales y de propiedad.

Astor, prestamista de Salinas Pliego, también aseguró a través de un comunicado de prensa que el empresario debió informar a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores que comprometió acciones de Elektra en una operación que involucraba el interés de los inversionistas minoritarios.

Si bien los 7 millones de acciones que colocó en prenda el presidente del Grupo Elektra y principal accionista de la controladora sólo representan el 3.1% de las acciones en circulación que suman más de 221 millones de títulos, el artículo 16 Bis de la Ley del Mercado de Valores establece que las emisoras del mercado de valores deben considerar un evento relevante todo acto, hecho o acontecimiento capaz de influir en los precios de los valores inscritos en el Registro Nacional de Valores. El conocimiento de eventos relevantes que no hayan sido revelados al público de conformidad con el siguiente párrafo, constituye información privilegiada.

Entre 2021 y 2024, las acciones de Elektra pasado de 1,600 a 450 pesos, una pérdida en su valor 71%.

Mientras tanto, Salinas Pliego asegura que los representantes de Astor le tendieron una celada para quedarse con el paquete accionario de Elektra y venderlo de manera fraudulenta en el mercado de valores. Aparentemente y, en línea con las declaraciones juradas de sus prestamistas, la financiera Astor, Salinas Pliego buscó sacar ventaje del valor de las acciones, pero también de la caída en los títulos y del diferencial cambiario.

Fue el 10  de septiembre de 2021 cuando los títulos de Elektra se cotizaban en un nivel de 1,577 pesos  cuando el equipo de asesores de Salinas Pliego se comunicó con sus prestamistas para asegurarse de que mantenían la tenencia de los títulos:  “Basándonos en cierta actividad en las acciones de Elektra [en la bolsa de valores], nos gustaría confirmar mediante correo electrónico de vuelta que ninguna de las acciones de Elektra pignoradas por Weiser ha sido prestada (préstamo de valores) según nuestro acuerdo”. En ese momento, hace tres años, cuando las acciones cotizaban en 1,500 pesos, a Salinas Pliego le aseguraron que los títulos no se habían vendido. Ahora las acciones de Elektra cotizan a una tercera parte de su valor.

En julio de 2021 para obtener recursos por 115 millones de dólares que le permitirían cumplir con el vencimiento de un crédito bancario con BNP Paribas, Ricardo Salinas Pliego – quien adeuda  al Estado mexicano créditos fiscales por al menos 35,000 millones de pesos – accedió a entregar en garantía un paquete de acciones con un valor  al menos cuatro veces mayor al monto del préstamo que necesitaba en una operación en la que, según las declaraciones de ejecutivos del Grupo Salinas ante las autoridades judiciales de Estados Unidos, la firma italiana Fininvesta actuó como asesor financiero. En el momento de entregar el paquete accionario por al menos 7 millones de títulos, éstos se cotizaban en 1,600 pesos.

Ante la Corte del Distrito Sur de Nueva York, un tribunal federal de primera instancia, Salinas Pliego, quien también preside la Corporación RBS, intenta recuperar el paquete de títulos de la controladora que cedió en garantía a prestamistas a cambio de 115 millones de dólares.

La trama del conflicto indica, sin embargo, que Salinas Pliego ya perdió el paquete accionario del Grupo Elektra que habría sido “rehipotecado” y comprometido a través de otros intermediarios, entre los que buscan involucrar a JP Morgan, según consta en las diligencias del caso presentado en Nueva York. Aún más, una parte de la “rehipoteca” de las acciones se habría presentado antes de la estrepitosa caída de 70% a principios de diciembre.

El término rehipotecación, es el acto mediante una entidad financiera (como un banco o corredor de bolsa) utiliza los activos que un cliente ha proporcionado como garantía (collateral) para respaldar sus propios préstamos o actividades financieras. Salinas Pliego basa su demanda contra Astor en el supuesto de que ni él ni su equipo autorizaron este tipo de transacciones.

A Salinas Pliego, según sus declaraciones ante la Corte londinense, le hicieron creer que el crédito y la firma de un contrato para otorgar como garantía un paquete de acciones del Grupo Elektra, lo había pactado con una firma con buena reputación corporativa en el mercado estadounidense y que los títulos accionarios estarían pignorados y sin posibilidad de negociarse porque estarían bajo la custodia de los intermediarios identificados como Weiser y Tavira, agentes designados para salvaguardar la garantía del préstamo otorgado por la firma Astor.

La compleja trama de esta operación con la que Salinas Pliego obtuvo recursos en dólares, pignorando acciones que cotizan en el mercado mexicano, para pagar un crédito de BNP Paribas, inició el 28 de julio de 2021 cuando se firmó el Acuerdo de Préstamo (entrega) de Acciones, como parte de la garantía. Salinas Pliego asegura que el prestamista – ahora identificado como Vladimir Sklarov y quien le entregó 115 millones de dólares – comenzó a apropiarse indebidamente de las acciones en garantía y a venderlas en el mercado abierto, utilizando una gran parte de los ingresos obtenidos para financiar los mismos préstamos pactados y pagando el resto de los ingresos de la venta a sí mismo y a varios terceros.

Salinas pliego asegura que en cuanto descubrió que la firma Astor no era (como se le habían hecho creer a sus ejecutivos) una institución financiera de buena reputación asociada con la conocida familia Astor de los Estados Unidos, sino que era un vehículo para el fraude de Vladimir Sklarov solicitaron medidas cautelares.

Pero ante la Corte, Sklarov sostiene que tenían derecho a negociar la garantía en virtud de los términos y de los incumplimientos del acuerdo que firmó Salinas Pliego. Y asegura que desde, septiembre de 2021, le notificaron al equipo de Salinas Pliego, al señor Eduardo González Salceda, vicepresidente de Finanzas, Inversión y Análisis del Grupo Salinas, que procederían a rehipotecar, a usar el activo colateral para generar recursos, como es habitual en la banca de inversión y en el mercado de este tipo de préstamos garantizados con valores, utilizando incluso algunos derivados para cubrir la operación.

Sin embargo, detrás de la tardía demanda de una medida cautelar, sostienen los abogados de Sklarov ante la Corte, está la intención del señor Ricardo Salinas Pliego de justificar ante el mercado la caída repentina de las acciones de Elektra.

En los antecedentes del juicio iniciado en Nueva York se relata que, durante la primavera de 2021, el señor Salinas Pliego quiso refinanciar un préstamo de BNP Paribas. Fue entonces, cuando el Sr. Salceda (sic) del Grupo Salinas, fue el responsable de gestionarlo. Había estado en contacto con un señor de apellido Torti, de Fininvesta, quien actuó como asesor financiero del señor Salinas. A su vez, el Sr. Torti trató con la Señora. Akbar, asesora financiera que estaba en contacto con el señor Sklarov. En su primera declaración jurada (posteriormente fechada el 5 de agosto de 2024) que se presentó ante el Juez Calver en la audiencia que, anota, se realizó sin previo aviso, el señor. Salceda del Grupo Salinas declaró que, durante las negociaciones del acuerdo para realizar el préstamo, creyó que Astor era una firma de préstamos legítima. El señor Torti, refiere, que Astor era propiedad de la rica familia Astor en los Estados Unidos y entendió que la Señora Akbar le había dicho eso.

Salceda, según los documentos del juicio, también explicó cómo se identificó como personal clave a Thomas Mellon y Gregory Mitchell, que se presentaban respectivamente como el CEO, el presidente y el director general de Astor Wealth Group. Durante y después de las negociaciones para alcanzar un acuerdo con Salinas Pliego, los correos electrónicos de Astor Capital Fund a Torti y a la Señora. Akbar fueron copiados a thomas.mellon@astorassetgroup.com y gregory.mitchell@astorassetgroup.com.

La rehipoteca, los derivados sobre los títulos de Elektra

Ante el Juez Calver, los abogados de Salinas Pliego sostuvieron que ninguno de estos individuos existe, que usaron identidades y nombres falsos, un hecho que fue admitido por el propio Sklarov. Salinas Pliego busca demostrar que son estafadores, que actuaron de mala fe y que lo engañaron, que no tienen reputación. Mientras tanto, los acusados buscarán demostrar que sólo hicieron lo que se pactó: usar las acciones de Elektra que fueron pignoradas para rehipotecarlas.

Salinas Pliego y su equipo, según declararon en Londres, pensaron que estaban negociando con una firma vinculada con Thomas Mellon, un descendiente de la famosa familia Astor con un legado financiero que se remonta a 200 años.

El acuerdo, dice el empresario, se firmó asumiendo que se trataba de una empresa respetable y que, si bien contenía una cláusula bajo el título: “Negociación con valores”, también establecía que, durante el plazo del préstamo, siempre y cuando no haya ocurrido un evento de incumplimiento, el prestamista no venderá ni en corto ni en el mercado de valores las acciones de la garantía en prenda.

Dicha cláusula también dejó en claro que, en caso de que ocurra un evento de Incumplimiento, el prestamista se reservaba el derecho de disponer de la garantía en cualquier bolsa de valores que cotice en bolsa. El prestamista tampoco podía transferir los valores a su propia cuenta a menos que ocurriera un evento de Incumplimiento insuperable.

Pero la inquietud que surgió en septiembre de 2021 confirmó los temores de Salinas Pliego quien, a través de sus asesores recibió la confirmación de los prestamistas encabezados por Sklarov al ser notificados que “Astor fusionará o agrupará los derechos colaterales como una cartera y suscribirá derivados para cubrir su riesgo y apalancamiento de liquidez. Esto lleva a que las acciones colaterales se pongan disponibles para préstamos a sus proveedores de liquidez y otras instituciones financieras que desean tomar prestadas las acciones”.

No obstante, también aseguraron que las acciones permanecían intactas, en las cuentas de los intermediarios que las custodiaban, en Weiser. A Salinas Pliego le aseguraron que la “rehipoteca” de sus acciones en garantía era una práctica estándar.

Sin embargo, el 5 de octubre de 2021, Weiser informó a Salceda que las 935 mil 913 acciones que Salinas Pliego había transferido a Weiser, después de la firma del acuerdo, habían sido transferidas a una cuenta a nombre de Astor Capital. Esto fue motivo de preocupación entre el equipo de Salinas Pliego, quien ordenó que se enviara un correo electrónico a Weiser solicitando una aclaración. Esa transferencia de títulos representaba una violación al acuerdo y que las acciones tenían que ser reintegradas. No hubo respuesta positiva para Salinas Pliego a quien le preocupaban las implicaciones fiscales.

“Es muy importante que tenga la sensibilidad de la necesidad de que las acciones regresen al contrato de garantía a más tardar esta semana, ya que, si el estado de cuenta se emite sin las acciones, podría desencadenarse una enajenación con grandes implicaciones fiscales. Por favor, realmente necesitamos su ayuda para que Astor y Weiser comprendan que están incumpliendo y violando los contratos”, escribió uno de los asesores de Salinas Pliego.

A raíz de ese desencuentro y luego que Weiser recuperó las acciones, Salinas Pliego pidió que se nombrara a otro custodio imparcial, por lo que la firma Tavira fue designada en un acuerdo firmado entre ambas partes el 30 de noviembre de 2021.

Así, el 15 de diciembre al menos 2 millones 350 mil acciones se transfirieron a Tavira. Después se le entregaron 314 mil 087 acciones el 20 de enero de 2022. Así continuó la entrega de acciones para garantizar el préstamo.

Entrega de acciones durante 2022 y 223

1,431.700 acciones a Tavira el 22 de junio de 2022;

128,.207 acciones a Tavira el 3 de abril de 2023;

1,600.000 acciones a Tavira el 4 de abril de 2023;

444, 389 acciones a Tavira el 12 de septiembre de 2023.

En total, se entregaron a Tavira un total de 6 millones 268 mil 383 acciones y la prueba presentada por Salinas Pliego es que, al 2 de agosto de 2024, Weiser y Tavira tenían un total combinado de 7 millones 204 mil 296 acciones, que valían 7,600 millones de pesos mexicanos o 415 millones de dólares estadounidenses.

Con más de 7,600 millones de pesos en acciones, Salinas Pliego garantizó un crédito de 2,154.3 millones de pesos, al menos 115 millones de dólares. Ahora, con el valor de 450 pesos, el precio de las acciones es mucho menor.

El problema fue que, de acuerdo con la declaración jurada de Sklarov del 2 de septiembre de 2024, en cada uno de los seis tramos que se entregaban las acciones a Tavira, Astor inmediatamente rehipotecó cada tramo de la garantía a otra firma llamada Vanderbilt, de conformidad con los supuestos “acuerdos de rehipoteca”, los acuerdos estándar que Salinas Pliego y su equipo desconocían, según han declarado.

La información que recibió el juzgado indica que:

  1. El 17 de diciembre de 2021, Astor rehipotecó 2 millones 350 mil acciones de garantía a

Vanderbilt.

  1. El 18 de enero de 2022, Astor “rehipotecó” 314 mil 087 acciones colaterales a

Vanderbilt.

  1. El 15 de junio de 2022, Astor “rehipotecó” un millón 431 mil 700 acciones colaterales a

Vanderbilt.

  1. El 5 de abril de 2023, Astor “rehipotecó” un millón 728 mil 207 acciones colaterales a Vanderbilt.
  2. El 13 de septiembre de 2023, Astor 3 “rehipotecó” 444 mil 389 acciones colaterales a

Vanderbilt.

El equipo de Salinas Pliego sostiene, sin embargo, que estas “rehipotecas” a Vanderbilt no se reflejaron en los extractos de cuenta mensuales enviados por Tavira a los demandantes; y que fue solo en un estado de cuenta proporcionado del 1 de agosto de 2024 por Tavira que se les informó que el 29 de julio de 2024 los 6 millones 268 mil 383 acciones estaban sujetas a “entrega FOP” (que significa “libre de pago” por parte de Vanderbilt) “a la cuenta de Astor.

Astor, de esta manera, recibió ganancias de la venta y venta en corto de estas acciones por parte de Vanderbilt. Mientras tanto, analistas del mercado mexicano de valores descifran qué sucedió con los títulos de Elektra entre 2021 y 2024.

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