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El secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, aseguró que, ante los eventos que se presentan en Sinaloa desde septiembre pasado y que generaron violencia que no se registraba en la región, el gobierno federal mantendrá el estado de fuerza en Culiacán, enfocándose en tareas específicas para detener a los generadores de actos violentos.
Ante una pregunta de Revista Fortuna durante la conferencia matutina de la presidenta Sheinbaum sobre la situación que prevalece en varias ciudades de Culiacán, el secretario detalló que la Secretaría de la Defensa Nacional ha aumentado su presencia en la ciudad, mientras que la Secretaría de Marina refuerza la seguridad en Mazatlán. Además, dijo, se están llevando a cabo operativos en las principales carreteras paragarantizar un tránsito seguro para los ciudadanos.
Aunque los enfrentamientos más intensos se han desplazado fuera de Culiacán, García Harfuch señaló que la Secretaría de Seguridad sigue trabajando en los delitos que afectan directamente a la población; en las últimas semanas, se ha reforzado la estrategia en la ciudad para atender las alertas y denuncias de la ciudadanía, particularmente en relación con delitos menores como el robo de vehículos y de negocios, que se han convertido en una preocupación creciente para los habitantes de Culiacán.
Otro de los ejes principales de esta estrategia de seguridad en el estado, según el funcionario, ha sido la detención de líderes delictivos responsables de los recientes conflictos. En este sentido, detalló que se han realizado operativos de alto impacto para desarticular células delictivas que provocan enfrentamientos y delitos en la región.
El secretario recordó que la ola de violencia en el estado comenzó por un hecho específico ocurrido en septiembre. Aunque reconoció que la solución a esta problemática no será inmediata, aseguró que el esfuerzo conjunto entre los diferentes niveles de gobierno permitirá restablecer la seguridad en Sinaloa.
“Este no es un trabajo de la noche a la mañana. Es un esfuerzo constante que requiere el compromiso del gabinete de seguridad y de las fuerzas armadas. Estamos enfocados en garantizar la tranquilidad de la población”, concluyó.
Por otro lado, respecto a los recientes reportes de explosiones en las afueras de Culiacán, que generaron especulaciones sobre la presencia de coches bomba, García Harfuch aclaró que las investigaciones han descartado esta posibilidad, identificando artefactos explosivos improvisados, algunos de ellos relacionados con el uso de drones. “El evento más reciente ocurrió en un ejido fuera de la ciudad, donde se incendió un vehículo, pero no hubo heridos. Seguiremos trabajando para prevenir el uso de este tipo de artefactos”, señalaron las autoridades.
En la presentación del informe de seguridad, Marcela Figueroa, titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, destacó que, entre octubre y noviembre de 2024, siete entidades concentraron el 49.7% de los homicidios dolosos: Guanajuato (12.0%), Sinaloa (7.3%), Estado de México (7.1%), Baja California (6.6%), Guerrero (6.2%), Chihuahua (5.8%) y Morelos (4.8%). Según los datos preliminares de 2024, Figueroa detalló que se registró un promedio anual de víctimas de homicidio doloso de 82.3%, lo que representa una disminución del 18.1% en el promedio diario respecto al período de 2019 a 2024.
García Harfuch, por su parte, informó que, entre el 1 de octubre y el 1 de diciembre, se desmantelaron 43 laboratorios clandestinos de metanfetaminas, asegurando 105,736 litros y 13,821 kilogramos de sustancias químicas, 44 reactores de síntesis orgánica, 56 condensadores y 5 destiladores, en los estados de Baja California, Estado de México, Guanajuato, Guerrero, Michoacán, Querétaro y Sinaloa. Este operativo causó una afectación económica a las organizaciones delictivas de 14,528 millones de pesos. Además, destacó el aseguramiento de 27.4 kilos de fentanilo en un recipiente proveniente de Hong Kong en Toluca, Estado de México.
Asimismo, García Harfuch agregó que, en el mismo período, la Estrategia Nacional de Seguridad permitió la detención de 5,333 personas por delitos de alto impacto, el aseguramiento de 2,471 armas de fuego y 57.9 toneladas de diversos tipos de drogas, entre ellas, 415,309 pastillas de fentanilo, lo que representa 50 millones de dosis que no llegarán a ser consumidas.
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