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En Canadá ya se planifica una respuesta firme y contundente tras la idea de Donald Trump de aplicar arancel del 25 por ciento a los dos países limítrofes: se tensiona la relación entre ambos países…
Públicamente, ambos dirán que la relación es fluida, que están en contacto permanente y trabajarán para buscar la mejor solución posible. Sin embargo, internamente, Canadá está indignada con Donald Trump por la medida establecida a partir del próximo 20 de enero y la aplicación del arancel de 25 por ciento. El llamado entre Trump y Trudeau se dio horas después del anuncio oficial del presidente electo de los Estados Unidos. Hubo cordialidad, pero la presión del arco político canadiense puso a Trudeau contra las cuerdas.
En las últimas horas de la noche del último miércoles, Trudeau se encontró con los Jefes de Gobierno de las 11 provincias del país para empezar a planificar una estrategia unánime ante los aranceles de Trump. En principio, Canadá quiere distanciarse de México porque entiende que no están a la misma altura en este conflicto comercial. “El número migrantes que intentan viajar de Canadá a Estados Unidos es una fracción mínima de los que intentan viajar de México a Estados Unidos”, sostuvo Trudeau.
Trudeau escuchó a todos los gobernantes y el objetivo interno sería desmantelar el actual tratado de comercio trilateral, T-MEC, para que Washington y Ottawa negocien un acuerdo bilateral sin México. Canadá entiende que unos aranceles del 10 por ciento le costarían a la economía canadiense alrededor de un 1 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB), equivalente a unos 30 mil millones de dólares estadounidenses. Un 25 por ciento, como pretende Trump, rompería la economía del país.
En ese contexto, Canadá tiene su carta: imponer aranceles a productos provenientes de Estados Unidos, en respuesta a la amenaza de Donald Trump. En cierto punto, la postura de Canadá coincide con la de Claudia Sheinbaum, quien apuntó: “A un arancel se le responde con más arancel”.
Hoy en día, Canadá exporta productos 36 estados de Estados Unidos. Casi el 60 por ciento de las importaciones de crudo de Estados Unidos son de Canadá, y el 85 por ciento de las importaciones de electricidad de Estados Unidos provienen de Canadá, destacan desde el entorno de Trudeau. Canadá tampoco descarta aplicar arancel en otros aspectos, sin olvidar que es el mayor proveedor extranjero de acero, aluminio y uranio para Estados Unidos.
Está claro que la postura y la idea de Trump no comenzó del todo bien. El republicano se encontró con respuestas duras de ambos lados y posiblemente, la relación con ambos ya estará condicionada. Canadá, como México, se prepara para una batalla táctica en lo comercial…
