Afectados por derrame en Río Sonora-Bacanuchi reclaman negociaciones entre Semarnat y representantes de Grupo Mexico. Piden diálogo con Sheinbaum

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Alicia Bárcena, secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), dio a conocer que la dependencia a su cargo ha sostenido reuniones con empresarios de Grupo México para trabajar en un plan conjunto de remediación del Río Sonora-Bacanuchi, que en el 2014 se vio afectado por el derrame de sulfato de cobre acidulado. Tras la declaración de la secretaria las víctimas de este desastre reclaman dichas negociaciones

“Estamos tratando de ver cómo hacemos la remediación. Sí, ya tenemos un plan para remediar el Río Sonora y lo estamos haciendo en conjunto con la empresa principal que actúa por allá”, explicó la secretaria Bárcena. Sin embargo los comités conformados por las comunidades que se vieron afectadas por el desastre argumentan que es inaceptable que se lleven a cabo reuniones con la empresa sin escuchar y dialogar con las comunidades afectadas.

Las reuniones, de acuerdo con la secretaria Alicia Bárcena, además buscar la reparación de daño tienen también por objetivo establecer y cumplir los compromisos que se hicieron para la población en materia de salud. 

“Ya estamos en contacto con la Secretaría de Salud, con Cofepris para que nos ayude también”, agregó

El derrame del río Sonora en 2014 fue un desastre ambiental que en 2023 la Semarnat comprobó que fue causado por el Grupo México, la compañía minera que operaba en la mina de Buenavista del Cobre, en Cananea, Sonora. 

¿Qué sucedió en el Río Sonora-Bacanuchi? 

El 6 de agosto de 2014, aproximadamente 40,000 metros cúbicos de sulfato de cobre acidulado se derramaron en el río Sonora y en el arroyo Bacanuchi. Este incidente contaminó el agua con metales pesados, afectando gravemente el ecosistema y las comunidades locales a lo largo del río, que dependían del agua para consumo, agricultura y ganadería.

A raíz del derrame las poblaciones cercanas al Río Sonora-Bacanuchi reportaron problemas de salud, como irritaciones en la piel, afectaciones respiratorias y gastrointestinales, y contaminación en la cadena alimenticia. En cuanto a daños económicos, reportaron que la agricultura, ganadería y pesca sufrieron pérdidas, y las comunidades enfrentaron dificultades para acceder a agua potable.

En respuesta el gobierno de México y Grupo México crearon un fideicomiso de 2 mil millones de pesos para cubrir los costos de remediación ambiental y atención a los afectados. Sin embargo, organizaciones y pobladores han criticado la gestión y transparencia de estos fondos, señalando que no fueron suficientes ni adecuadamente manejados.

Grupo México también recibió multas, aunque fueron consideradas bajas en comparación con el daño causado. Además, varias comunidades presentaron demandas, pero han enfrentado dificultades en la justicia debido a los costos y procesos prolongados.

Desde el desastre, han surgido reportes de nuevas afectaciones. A pesar de las promesas de remediación, muchas comunidades continúan con problemas de acceso a agua limpia, y algunos residentes reportan problemas de salud persistentes. Además, Grupo México sigue operando en la zona y ha tenido otros incidentes ambientales en el país, lo cual ha generado preocupación sobre la regulación y supervisión de sus actividades.

En 2019 y 2020, el gobierno federal reexaminó el fideicomiso y la respuesta al desastre, y algunos activistas han pedido una investigación más exhaustiva y acciones para mejorar la supervisión de las empresas mineras en México.

De esta manera, durante la presentación del Plan Nacional Hídrico, que contempla 16 proyectos de saneamiento, al hablar en particular del caso del río Sonora-Bacanuchi, la Secretaría Alicia Bárcena agregó que si bien se están llevando a cabo este plan de reparación en conjunto con la empresa responsable, el gobierno también está tomando en consideración que la parte geológica de Sonora ya contiene algunos metales pesados por defecto. 

Frente a estas declaraciones, en un comunicado, los afectados demandaron aclarar la información proporcionada en la conferencia matutina y no desviar la atención de las responsabilidades reales que tiene Grupo México en el desastre. Señalaron como grave e indignante que la secretaria calificara el derrame como un “accidente”, cuando la Semarnat comprobó en 2023, en su último dictamen sobre el río Sonora, que fue un desastre provocado por negligencia de Grupo México.

“Este lenguaje utilizado hoy minimiza la responsabilidad de la empresa y desinforma a la opinión pública; es grave que se regrese a esta narrativa del sexenio de Enrique Peña Nieto”.

Los Comités también expresaron que es inaceptable que el gobierno de la presidenta Sheinbaum se reuna con Grupo México sin antes escuchar y dialogar con las comunidades afectadas, violando el derecho a la participación de las víctimas reconocido en la sentencia de la Suprema Corte de Justicia y en la recomendación 50/2024 de la CNDH”. 

Asimismo calificaron como un retroceso las reuniones y dijeron que continúan a la espera de que se lleve a cabo “el diálogo prometido por la presidenta Claudia Sheinbaum hace cinco meses”.

En respuesta a este comunicado, la Secretaría Alicia Barcena aseguró, a través de sus redes sociales, que el gobierno sí dialogará con las comunidades afectadas por el desastre:

“Su voz y participación es esencial para que juntos actuemos en un programa de remediación. Nada sobre ustedes sin ustedes!”, se lee en la publicación de X.

Comités de Cuenca de Río Sonora dio gracias a la secretaria por su respuesta, también por medio de su cuenta de X, e informaron que ya han realizado la soilicitud para entablar dicho diálogo, sin contar aún con una respuesta.

“Quedamos atentxs a la propuesta de fecha, idealmente en los territorios afectados por el derrame” agregaron. La pregunta de los Comités continúa siendo: “¿Cuándo será este diálogo?”.

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