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Luego de reconocer la decisión de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, del gobierno de Claudia Sheinbaum, de avanzar en la consolidación fiscal y reducir el déficit, los analistas de Citibanamex aseguraron que los supuestos de la dependencia responsable de las finanzas públicas y el gasto público resultan sumamente optimistas y que, además, reflejan muchos sacrificios para alcanzar la consolidación fiscal.
Al clasificar como lo bueno, lo malo y lo feo del paquete económico, los economistas de la institución aseguran que entre “lo malo” se deben ubicar, precisamente, los supuestos optimistas y los sacrificios para la consolidación fiscal.
Y agrega: La estabilización de la deuda pública en 51.4% del PIB para 2025 en adelante se sustenta en elementos cuestionables en términos de factibilidad y optimalidad, en nuestra opinión.
Lo malo:
Primero, un crecimiento económico de 2.3%, desde uno de entre 1.5% y 2.5% en 2024, sustentado en el consumo y la inversión; lo cual resulta contraintuitivo en el contexto de un recorte de gasto público de 1.5 pp del PIB. Además, dicha estimación se ubica por arriba de cualquier proyección de analistas (por ejemplo, considerando nuestra Encuesta de Citibanamex de Expectativas o la de Banxico más recientes), o las de instituciones como Banxico, FMI, OCDE y Banco Mundial.
Segundo, efectos significativos de medidas recaudatorias por implementar como la de modernización tecnológica.
Tercero, recortes en inversión física por 0.7pp del PIB cuando ésta ya se había sacrificado en el sexenio de AMLO y el país requiere mayor infraestructura (el sexenio anterior este gasto promedió 2.8% del PIB, por debajo de las dos administraciones previas en más de0.5pp del PIB).
Cuarto, tipo de cambio que se aprecia significativamente a un nivel también fuera de rango de las proyecciones de los analistas, lo que ayuda a bajar la estimación en pesos de la deuda externa que plante a la SHCP.
Lo feo:
La deuda seguirá aumentando con las implicaciones que eso conlleva. Si bien no nos sorprendió, la SHCP en lugar de presentar estimaciones de mediano plazo que reflejaran sus intenciones de política de ingresos y gasto, decidió presentar proyecciones inerciales (posiblemente solo para cumplir con la exigencia de Ley), lo que las hace poco útiles en términos de análisis para la toma de decisiones.
La SHCP señaló que el programa económico de mediano plazo de este sexenio se presentará en el Plan Nacional de Desarrollo, el Programa Nacional de Financiamiento del Desarrollo y en los Criterios para 2026. Es decir, será hasta dentro de un año cuando conoceremos los detalles de la política económica para 2026-2030.
Es difícil anticipar si esta contendrá o no una reforma fiscal, pero consideró que, si existe un compromiso real con la sostenibilidad de las finanzas públicas, así tendría que ser.
“Para ilustrarlo, considerando nuestras estimaciones de marco macroeconómico, estimación inercial de ingresos públicos y escenario mínimo asequible de gasto, para 2026 la deuda pública alcanzaría un nivel de 55.8% del PIB, 4pp del PIB mayor que la presentada por la SHCP. Si bien la decisión de posponer el anuncio de una posible reforma fiscal este año permite cumplir un compromiso de campaña, se tiene el costo de falta de información para los agentes económicos. En este sentido, estimamos que las variables de riesgo país de mantendrán elevadas y que las agencias calificadoras seguirán cambiando la perspectiva para la deuda soberana de establea negativa”, indicó.
Sitúa SHCP déficit público 2025 en 3.9% y nivel deuda en 51.4%