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El presidente de Brasil termina de determinar su postura. Tras una serie de decisiones desacertadas de Nicolás Maduro, el mandatario brasileño rompe relaciones con frases punzantes…
En las últimas semanas, Nicolás Maduro perdió el control de sí mismo. El líder venezolano tomó decisiones desacertadas, que lo expusieron ante toda la región: desde pedir la captura de Edmundo González hasta planear la invasión a la embajada argentina en Venezuela, donde se encuentran refugiados seis dirigentes opositores desde marzo.
La respuesta fue inmediata porque la Cancillería de Brasil advirtió que no cederá la custodia de la Embajada de Argentina y desde Buenos Aires se exigió respetar la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas. Increíblemente, esta feroz medida de Maduro puso a Lula y Milei desde el mismo lado ya que la seguridad de la Embajada de Argentina está en manos de Brasil, y por lo pronto, el presidente de Brasil no acatará el pedido del venezolano.
“La República Bolivariana de Venezuela ha tomado la decisión de revocar, de manera inmediata, el beneplácito otorgado al Gobierno de la República Federativa de Brasil para ejercer la representación de los intereses de la República Argentina y sus nacionales en territorio venezolano, así como la custodia de los locales de la misión diplomática incluido sus bienes y archivos, según se había anunciado en el comunicado conjunto de fecha 5 de agosto de 2024. Decisión que ha sido notificada a los estados concernidos a través de canales diplomáticos”, asegura una comunicación oficial de Caracas.
En este contexto, Lula se hartó de Maduro y rompió relaciones por completo. En una entrevista con el medio brasileño Difusora, Lula puntualizó: “Lo de Maduro, a esta altura, es decepcionante. En Brasil se aprendió de democracia con mucho sufrimiento, cuando la gente es extremista no la acepta. Creo que Maduro, como presidente, debería probar quién fue el elegido del pueblo venezolano, pero él no lo hace”.
En la última semana estaba estipulada una reunión entre Lula, Gustavo Petro y López Obrador, pero fue suspendida y no tiene fecha marcada para realizarse. Lo cierto es que el apoyó general a Maduro se debilita cada vez un poco más. Por su parte, Edmundo González pidió asilo en España y es un golpe a la frustración de la oposición…
