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El gigante chino de autos eléctricos prefiere esperar y ver el resultado de la carrera presidencial entre el Partido Republicano y el Partido Demócrata, con el expresidente Donald Trump y la vicepresidenta Kamala Harris al frente, respectivamente, un evento que culminará el 5 de noviembre.
BYD Co, el principal fabricante de vehículos eléctricos de China, no anunciará una importante inversión en una planta en México hasta al menos después de las elecciones estadounidenses, según personas familiarizadas con el asunto, ya que el cambio de política estadounidense obliga a las empresas globales a esperar y ver qué pasa, cita información de la agencia Bloomberg fechada en Nueva York.
BYD estaba explorando tres ubicaciones para una instalación de producción de automóviles en México, pero ahora dejó de buscar activamente, dijeron varias de las personas, que pidieron no ser identificadas porque se trata de información que es privada.
El aplazamiento se debe en gran medida a que BYD preferiría esperar y ver el resultado de la carrera entre el expresidente Donald Trump y la vicepresidenta Kamala Harris a principios de noviembre, dijeron las personas.
Agregaron que los planes de fábrica en pausa de BYD aún pueden reactivarse o cambiar, y no se ha tomado una decisión final. Los representantes de BYD no respondieron a una solicitud de comentarios.
En suspenso
Un área que estaba bajo consideración era alrededor de la ciudad de Guadalajara, dijo una de las personas. Esa región ha surgido durante la última década como un centro tecnológico a veces descrito como el Silicon Valley de México. BYD envió una delegación a la zona para una visita en marzo.
Stella Li, vicepresidenta ejecutiva de BYD, también visitó la Ciudad de México en febrero para el lanzamiento del modelo Dolphin Mini del fabricante de automóviles, mientras que la alta gerencia se reunió en un palco patrocinado por BYD en el E-Prix de Fórmula E de la capital del país en enero.
México ha visto un aumento en los anuncios de inversión de fabricantes de automóviles chinos y occidentales, incluido Tesla Inc. Pero la megafábrica planeada por Tesla se suspendió en julio, a la espera del resultado de las elecciones estadounidenses.
El candidato republicano Trump, a quien el director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, ha respaldado, ha amenazado repetidamente con imponer aranceles a los productos fabricados en México.
Tesla había anunciado planes para construir la planta en el estado de Nuevo León, con una inversión estimada de 10 mil millones de dólares en varias fases.
México podría ser uno de los sitios de producción clave de BYD en el extranjero, junto con las plantas que actualmente está construyendo o que ya opera en Brasil, Hungría, Turquía y Tailandia.
Al igual que otros grandes fabricantes de automóviles chinos, BYD, con sede en Shenzhen, busca cada vez más localizar la producción para evitar los aranceles punitivos que los gobiernos de todo el mundo están empezando a imponer a los automóviles eléctricos y vehículos híbridos enchufables importados de la mayor economía de Asia.
Si bien BYD ha dicho anteriormente que cualquier automóvil construido en México sería para consumo local, la perspectiva de exportar su asequible gama de vehículos eléctricos a un enorme mercado automotriz como Estados Unidos sería tentadora.
Por imposición arancelaria
México es visto como un punto de aterrizaje estratégicamente atractivo para los fabricantes de automóviles extranjeros dada su proximidad a Estados Unidos. También es parte de un acuerdo de libre comercio de América del Norte con Estados Unidos y Canadá.
Estados Unidos ya planea imponer aranceles del 100 por ciento a los vehículos eléctricos chinos, una medida que, según la administración del Presidente Joe Biden, garantizará que el futuro de la industria automotriz sea fabricado en Estados Unidos por trabajadores estadounidenses.
La administración Biden también está observando cualquier intento de las empresas chinas de exportar automóviles desde México a Estados Unidos, y considerando formas de bloquearlos si buscan eludir los aranceles dirigidos a los vehículos eléctricos fabricados en China, dijo en una entrevista en mayo la representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai. Li.
Sobre BYD, la funcionaria dijo en una entrevista con Bloomberg News a finales del mes pasado que planeaba reunirse en algún momento con la presidenta entrante de México, Claudia Sheinbaum, quien asumirá el cargo el 1 de octubre, y que la compañía todavía estaba sopesando tres ubicaciones para una fábrica en México.