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La moneda nacional lideraba el martes la caída más pronunciada en el mercado internacional de cambios medido por los principales cruces, con una depreciación de 0.79% en 19.55 unidades por dólar. La aprobación del dictamen de la reforma al Poder Judicial en comisiones en el Congreso el día previo era un elemento de nerviosismo.
La depreciación del peso mexicano no solo dejó un balance negativo de 2.48% la semana previa, sino que hilaba su segunda depreciación consecutiva el martes, de 0.79% en sus primeras operaciones, para cotizar en 19.55 unidades por dólar y tras alcanzar máximos en los 19.5611.
Analistas y operadores destacaron que el avance de la Reforma Judicial, aprobada el lunes por la Comisión de Puntos Constitucionales del Congreso después del cierre de los mercados, seguía presionando al peso. Los tomadores de decisiones también están a la espera de la publicación el viernes del dato de la inflación del consumo personal en EU, el indicador más seguido por la Reserva Federal (Fed).
“El tipo de cambio extiende el rebote de ayer y se vuelve a colocar cerca de máximos desde diciembre de 2022, en un entorno de incertidumbre interna” consignó en una nota el banco Bx+ en referencia a la aprobación de la iniciativa en comisiones.
Las cámaras de Comercio de Estados Unidos y Canadá con representación en el país recomendaron evaluar los riesgos que implica la reforma en los términos actuales y cuyo cambio medular es la elección de jueces y ministros mediante el voto popular. Sostuvieron que son varios organismos los que han advertido sobre su impacto económico, y en consecuencia social.
Alertas
La Cámara de Comercio de EU (Amcham) destacó que en toda democracia, el camino para fortalecer el Estado de derecho debe ser evaluado, debatido y enriquecido. “Cuando múltiples voces se alzan en un coro de advertencias, es prudente prestar atención”, sostuvo.
“Como empresas invertidas en México y generando millones de empleos por décadas pasadas y futuras, vemos en la reforma al Poder Judicial riesgos en su independencia, y un potencial retraso en la profesionalización de la justicia especializada, incremento en costos, reducción de la efectividad del sistema judicial y la generación de incertidumbre para la inversión”.
La Cámara de Comercio del Canadá en México (CanCham), a su vez, resaltó que la reforma judicial y la desaparición de siete órganos autónomos generan agobio en la comunidad de negocios e inversionistas canadiense ante los efectos negativos que puede tener “en la certidumbre, transparencia y profesionalismo en el manejo de las materias que dichos entes tienen a su cargo”.
Los empresarios canadienses, aseveró, están convencidos “del inmenso potencial que la sociedad de Norteamérica le ofrece a México en los más variados sectores para su modernización e integración creciente”.
Gabriela Siller, directora de análisis de Grupo Financiero Base señaló en una nota el martes que los avances de la reforma propuesta ponen en riesgo la relación comercial con EU y Canadá.
“Esto se espera frene la llegada de nuevas inversiones y eventualmente podría también detener la reinversión de utilidades y contratación de personal de empresas que ya están en México. La reforma tiene el potencial de llevar a la economía mexicana hacia una recesión”.
Los datos económicos de México más recientes son favorables en este momento. El martes se publicó que la balanza comercial del país presentó un déficit por 72 millones de dólares (mdd) en julio resultado del crecimiento del 14.7% anual en las exportaciones y de 13.3% de las importaciones.
Jorge Gordillo, director de análisis en CI Banco apuntó que otro factor relevante en la toma de decisiones de los inversionistas es la publicación el viernes del dato de la inflación del consumo personal en EU, (inflación PCE), el indicador más seguido por la Reserva Federal (Fed).
“El comportamiento de esta referencia puede contribuir a especular la magnitud del recorte de tasas que podría anunciar la Fed a mediados de septiembre”, dijo.
En la lista de las monedas con las mayores pérdidas, encabezada por el peso mexicano, le seguía el peso colombiano, con una depreciación de 0.47%; la rupia de Indonesia de 0.42%. El dólar taiwanés y el peso chileno, a su vez, presentaban caídas de 0.38% cada uno.