Retos económicos para 2025 (con lo que llevamos en 2024)

Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 27 segundos

Si nos centramos hacia cómo caminará la segunda mitad del año, destacan la inflación y la política monetaria. Ante la reciente aceleración de la primera, Banco de México podría tomar una posición más cautelosa, y mantener la tasa de interés hasta que la inflación retome una tendencia descendente.

*Por Rodolfo Augusto Ostolaza Berman, subdirector de estudios económicos de Citibanamex

Durante la primera mitad de 2024, el crecimiento del PIB presento una desaceleración si lo comparamos con el mismo periodo de 2023. 

Asimismo, la inflación ha repuntado en los últimos meses, debido principalmente a los precios agropecuarios, mientras que Banco de México ha realizado únicamente un recorte de 25 puntos base en la tasa de interés. Seguimos de esta forma a la espera del siguiente recorte, considerando que el apretamiento monetario comenzó antes en el país que en nuestro vecino del Norte, donde ya se empieza a discutir un primer recorte en la reunión de septiembre. 

En México, la tasa de desempleo se mantiene en mínimos históricos, derivado en buena medida de la incorporación de la población disponible al mercado laboral. Al mismo tiempo, los salarios reales mantienen su tendencia alcista, apoyados por los incrementos en el salario mínimo. El expansivo gasto público, a pesar de la restricción monetaria, muestra crecimientos similares a los exhibidos en la crisis financiera de 2008-09. 

Entre los retos económicos que enfrentará el país durante la segunda mitad del año destacan la inflación y la política monetaria. Ante la reciente aceleración de la primera, Banco de México podría (¿debería?) tomar una posición más cautelosa, y mantener la tasa de interés hasta que la inflación retome una tendencia descendente. 

Sin embargo, dada la postura relativa con EUA, el comportamiento de la inflación subyacente, las expectativas de inflación (que se encuentran bien ancladas alrededor de 3.5%) y la desaceleración de la producción, el Instituto Central optó por hacer el segundo recorte a la tasa de interés, tras el inicio del ciclo restrictivo en junio del 2021 que llevó a la tasa referencial a niveles de 11.25% hasta febrero de este año.

El segundo recorte generó presiones de apreciación en el peso ante la disminución del diferencial de tasas, que serían temporales si la Reserva Federal también reduce su tasa en septiembre.

Por el comportamiento de la inflación subyacente o medular, el Banco de México tiene la oportunidad de realizar recortes más amplios, si se pondera el panorama inflacionario y de crecimiento, más que las últimas lecturas. 

Debilidad hacia adelante

En cuanto al crecimiento, seguimos esperando que la desaceleración que inicio en el cuarto trimestre del año pasado continue, debido parcialmente a la desaceleración del gasto público, conforme las obras insignia de la administración federal concluyan, y al debilitamiento de la demanda interna, particularmente del consumo privado, lo que estaría relacionado con un relajamiento en el mercado laboral (el cual aun no sucede). 

La incertidumbre relacionada con las elecciones presidenciales de EUA seguirá generando volatilidad – particularmente en el tipo de cambio – y cuando conozcamos al vencedor tendremos una mejor idea de su política con México, pero, en general, se avizora más áspera en el ámbito económico. 

Los retos estructurales, como la informalidad laboral, la insuficiente infraestructura para aprovechar las tendencias de relocalización, el rezago educativo, la desigualdad y la descendente productividad laboral se mantienen como asignaciones pendientes, ante el nubarrón económico que se espera en los próximos meses.

******

*Rodolfo es subdirector de Estudios Económicos de CitiBanamex, donde se encarga de dar seguimiento a los sectores real y externo de la economía mexicana. 

Tiene una Maestría en Economía de El Colegio de México, una Licenciatura en Finanzas de la Universidad Tecnológica de México, y una Licenciatura en Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). 

Anteriormente, fue economista senior en el Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos. También desempeñó los cargos de jefe de la sección de estadísticas de comercio internacional en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

Rodolfo también estuvo al frente de la Dirección de Insumo Producto en el INEGI, y fue jefe de la Oficina de Medición de los Sectores Primario y Terciario del Banco de México (Banxico).

 

 

También te puede interesarENTREVISTA -Solicitan empresarios vinculados al comercio exterior mantener solidez de política monetaria