Y a todo esto… ¿París 2024 será negocio?

TelevisaUnivision transmitirá los Juegos Olímpicos 2024.
TelevisaUnivision transmitirá los Juegos Olímpicos 2024.

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Los Juegos Olímpicos de París 2024 ya son los sextos más caros de la historia. ¿La inversión será redituable? Algunos lo dudan.

Para no pocos interesados en el tema, organizar unos Juegos Olímpicos puede ser un evento que revitalice la economía de una ciudad. Sin embargo, una mirada más profunda podría indicar lo contrario.

Dicho de otra forma: ¿los Juegos Olímpicos de París 2024 serán redituables y representarán un beneficio para la economía francesa?

Un reciente reporte de GBM ofrece algo de luz al respecto.

LOS JUEGOS MÁS COSTOSOS

De acuerdo con cifras oficiales, los Juegos Olímpicos de París 2024 tendrán un costo de 8,800 millones de euros —algo así como 9,500 millones de dólares— con lo que serán los sextos más caros de la historia.

El primer lugar lo ocupan los Juegos Olímpicos de Inverno de Sochi 2014, con 25,000 mdd; seguidos por Tokyo 2020, con 20,000 mdd; Londres 2012, con 17,000 mdd; Río 2016, con 16,000 mdd y Barcelona 1992, con 11,000 mdd.

Primer punto a destacar: cinco de los seis juegos más caros de la historia han tenido lugar en los últimos 12 años. Estos eventos, por las necesidades de infraestructura, consumen cada vez mayores presupuestos.

Los 8.800 millones de euros provendrán de dos fuentes: un 50% administrado por el Comité Organizador —proveniente de la venta de entradas, patrocinios y una aportación del Comité Olímpico Internacional— y el otro 50% es gestionado por la Autoridad de Entrega de Obras Olímpicas.

“A diferencia del presupuesto que viene del comité organizador, en este caso el 52% del dinero para obras y reformas urbanas, es decir, 2,300 millones de euros, derivan de las arcas públicas de Francia”, detalla GBM.

Para París 2024, se desarrollaron 70 obras, que incluyen la construcción o renovación de sedes, adaptación de entornos urbanos y mejoras en ejes vehiculares.

“Destacan algunas por su extensión, simbolismo y relevancia económica. Una de ellas es el Centro Acuático, que tuvo un costo de casi 200 millones de euros y se inauguró el pasado 4 de abril. Este lugar será sede de las pruebas de natación, nado artístico, clavados y waterpolo”, agregó GBM.

Sin embargo, la obra que consumió más recursos fue la Villa Olímpica, que implicó un desembolso de 2,000 millones de euros. Finalizados los juegos, la obra albergará al Ministerio del Interior y será el hogar de 3,000 parisinos.

¿PERO SÍ SON NEGOCIO?

De acuerdo con GBM, “muchos señalan, sobre todo sus organizadores, el viejo dicho de que los Juegos Olímpicos ‘generan un impulso a la economía’ en tiempos de una alta inflación”.

“Pero la realidad —advierte— es que la historia ha demostrado que hay poca tasa de retorno de la inversión y que la mayoría de las veces suele ser una sangría financiera, ya que muchos anfitriones terminan gastando mucho dinero en infraestructura especializada que tiene un uso limitado después del evento”.

Y no solo se gasta en infraestructura.

Tokyo gastó 150 millones de dólares en su fallido intento por organizar los Juegos Olímpicos de 2016 y casi la mitad de esos recursos para el 2020 que sí ganó.

“También está el caso de Río de Janeiro 2016, que solamente 6 meses después del evento, la ciudad debía unos 40 millones de dólares. Cuatro de los estadios no lograron encontrar administración del sector privado y la propiedad pasó al gobierno federal”, recuerda GBM.

“Muchos brasileños molestos —agrega— señalaron que la unidad que se logró durante los Juegos Olímpicos se desintegró apenas concluyeron”.

Los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 dejaron un déficit de 4,300 millones de dólares y fueron la semilla de la crisis que vivió la nación helénica en el año 2009.

El segundo lugar lo ocupa Londres 2012, donde el déficit fue de 5,200 millones de dólares.

Pero la medalla de oro se la lleva Montreal 1976, donde el déficit —que terminó de pagarse casi 30 años después de los juegos— llegó a los 5,700 millones de dólares.

De hecho, los déficits que dejan los Juegos Olímpicos a muchas ciudades anfitrionas han provocado que cada vez haya menos postores para organizar la justa olímpica.

Para 2024, por ejemplo, ya solo se presentaron París y Los Ángeles, por lo que el COI otorgó de una vez la sede del 2028 a la ciudad californiana.

Antes era común ver a cinco o seis postores pero, para el 2032, solo se presentó Brisbane, en Australia.

No son pocos los especialistas que especulan que, más pronto que tarde, el COI otorgará sedes compartidas —como ya lo hace la FIFA en los mundiales de futbol— a fin de reducir los desembolsos que implican los Juegos Olímpicos.

“¿Será que París le pueda dar la vuelta financieramente? Se ve complicado”, concluye GBM.