Animales callejeros: México, muy lejos de ser pet friendly

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Entre las nuevas reformas constitucionales que propone el presidente Andrés Manuel López Obrador destaca la decisión de elevar a rango constitucional la protección de los animales. La iniciativa busca garantizar, a través de la modificación a dos artículos, la prevención y prohibición del maltrato a los animales, reconociéndolos como seres que deben rrecibir un trato digno.

Sin embargo, la protección y el cuidado de los animales dentro de los planes, políticas públicas y programas educativos nacionales, se enfrenta a la realidad de un maltrato sistemático y la ausencia de infraestructura para atenderlos.

Yareth Arciniega

En México aproximadamente 28 millones de animales de compañía son abandonados, una cifra que crece 20% anualmente; de estos, 25 millones viven en la calle. Este fenómeno ha sido normalizado a tal grado que es difícil imaginar una ciudad sin estas criaturas, ya sean perros o gatos, deambulando por las calles.

Están en todas partes, incluso podría decirse que su ternura y resiliencia forman parte de la cultura popular mexicana, así como la iniciativa ciudadana de ayudarlos con un poco de comida o tan siquiera una caricia.

A pesar de que no existe un censo que indique de forma precisa la cifra, la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial de la CDMX estima que en la Ciudad de México son alrededor de un millón 200 mil los animales que viven en las calles, cantidad que equivale a llenar el Estadio Azteca casi 15 veces.

Revista Fortuna conoció uno de estos casos en el barrio de Coyoacán: una gata abandonada de pelaje gris y ojos amarillos que expresaban con claridad miedo. Lucía enferma y triste.  El cráneo fracturado en cuatro y la mandíbula desencajada, revelaron los análisis realizados por un veterinario dieron cuenta de que la historia de maltrato hacia esta pequeña criatura iba más allá de las lesiones evidentes.

Las personas que intentaron ayudarla, la encontraron en estas condiciones; escondida en un rincón al interior de una privada. Estaba confundida, luchando por no ahogarse con la sangre que brotaba de su boca a consecuencia de un golpe propinado por una persona que intentaba ahuyentarla de su jardín. Al evaluarla, una veterinaria de la alcaldía Coyoacán dijo que la fractura de mandíbula probablemente era de hace muchos años, pero, sorprendida por el alto umbral de dolor de la gata, aseguró que las cuatro del cráneo eran recientes y sólo podía arreglarlas – con una placa de titanio- uno de sus colegas, que tenía su consultorio en el Estado de México.

La posibilidad de salvarle la vida a esta gata fue el incentivo que llevó a sus rescatistas, una noche de noviembre, hasta Cuautitlán Izcalli, porque en el Estado de México la operación sería un poco más barata frente a la imposibilidad de contar con apoyo de las instituciones públicas. Fueron muchas las llamadas que hicieron para buscar algún albergue o veterinario público pero la respuesta siempre fue la misma: no hay un servicio público médico para animales abandonados y la recomendación era sacrificarla.

Sin embargo, los análisis previos advirtieron que la operación, que se había cotizado en aproximadamente 13 mil pesos, no se podría llevar a cabo ya que la gata sufría de una insuficiencia renal avanzada. De esta forma los rescatistas se enteraron que su Fortuna, que fue con el nombre que decidieron bautizar al animal, había sido víctima de más de un tipo de violencia a lo largo de su vida.

Antes de la reforma constitucional para proteger a los animales, la iniciativa de reforma presentada al Congreso por la Diputada Ana Jocelyn Villagrán en 2021 indica que el maltrato animal no se limita a lesiones físicas, sino que también involucra el daño psicológico, el descuido reiterado y el abandono.

Pero ¿qué es lo que orilla a una persona a abandonar a su mascota? Esta misma iniciativa recuerda que en 2014 el Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE) publicó una encuesta sobre el abandono y el maltrato animal en la cual se identificó que en México el 24.4% de las personas que abandonan a un animal de compañía lo hacen por falta de dinero para solventar sus necesidades; el 17.5% porque se dieron cuenta de que es una gran responsabilidad; el 14.2% lo hace porque ya no tiene tiempo, mientras que el 12.3% los abandona porque ya no quiere mantenerlos y el 12.1% porque ya no tiene espacio.

En este sentido, el estudio “Índice de las Mascotas Sin Hogar (IMSH)” realizado en 2021 por Mars Petcare, líder mundial al servicio de la salud de las mascotas y de sus necesidades nutricionales, agregó que el 53% de los mexicanos que fueron encuestados abandona a sus mascotas porque cree que es difícil encontrar una casa en renta que permita tener un perro y un 44% lo cree cuando se trata de tener un gato.

A pesar de que la población mexicana muchas veces está plenamente consciente de estas limitantes, la Encuesta Nacional de Bienestar Autorreportado (ENBIARE 2021) del INEGI muestra que son casi 80 millones de mascotas las que viven en los hogares mexicanos y las asociaciones de rescate animal que, muchas veces no se dan abasto para cubrir las necesidades de los animales refugiados, continúan registrando un aumento en las adopciones de perros y gatos durante el mes de diciembre. El problema viene meses después, entre marzo y abril, cuando el número de casos de abandono también aumenta.

¿A qué se debe esta problemática?

En México, aproximadamente 28 millones de animales son abandonados y la cifra crece 20% anualmente a causa de la falta de cultura de esterilización por parte de los dueños.  People for the Ethical Treatment of Animals (PETA), la mayor organización de derechos animales a nivel mundial, explica que esterilizar y castrar a las mascotas haría una gran diferencia, ya que una sola perra sin esterilizar y su descendencia pueden dejar cerca 67,000 cachorros en sólo seis años. Por otro lado, en siete años, una gata y sus crías pueden tener 370,000 gatos.

Pero, según indican las encuestas, la mayoría de los mexicanos que abandona a sus perros o a sus gatos lo hace por falta de recursos para cubrir sus necesidades y el costo aproximado de una cirugía para esterilizar a un animal de compañía en un hospital privado va desde los 1,200 a los 8,700 pesos. Sin embargo, la contratación de un seguro para mascotas también puede ayudar a sortear este tipo de gastos cuando se tiene un animal de compañía.

De acuerdo con la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), en México las personas gastan en promedio 3 mil 500 pesos al mes en productos y servicios para mascotas, lo que ha provocado que la industria dispare sus ventas en 27.2 por ciento en 2023, posicionando al país en el doceavo lugar a nivel mundial en cuidado y bienestar animal, con ventas que ascienden a los 2 mil 400 millones de dólares. Pero hay condiciones médicas, accidentes y servicios para los perros y gatos que se salen de este presupuesto.

Por ello, compañías de seguros ofrecen paquetes que cubren consultas veterinarias, vacunación y asistencia telefónica, responsabilidad civil por daños a terceros, asesoría veterinaria y legal en caso de extravío o desparasitación, vacunas, esterilización, descuentos en clínicas o pensiones y, en caso de fallecimiento, hay seguros que incluso cubren una parte de los gastos funerarios u ofrecen una indemnización. Pero entre los mexicanos, al igual que una falta de cultura sobre la esterilización o castración de los animales de compañía, existe una falta de cultura sobre la contratación de seguros.

Pero en cuanto a las esterilizaciones, en la Ciudad de México existen alternativas más económicas como las campañas de esterilización que ofrece la Facultad de Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional Autónoma de México, así como las campañas de esterilización canina y felina que pone en marcha anualmente el gobierno federal, las cuales surgieron en la década de los noventa.

A través de las semanas nacionales de vacunación antirrábica canina, las autoridades mexicanas detectaron que de 7 millones en 1990, la población  de perros vacunados pasó a 13 millones en 1999, y previeron que en las siguientes décadas este número se triplicaría, con lo que no sería suficiente el presupuesto que la Secretaría de Salud destinaba para este fin y había que hacer algo para que no ocurriera, llegando a la conclusión de que una estrategia efectiva para estabilizar el crecimiento poblacional era la esterilización quirúrgica.

Una vez implementada la estrategia, de acuerdo con el Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades, en 1994 se realizaron cerca 8 mil esterilizaciones. De 1994 a 1999 alrededor de 104 mil y del 2000 a 2016 se esterilizaron en México 4.8 millones de perros y gatos de manera gratuita con la participación de todas las entidades del país.

Si bien a nivel nacional se desconoce el número de animales esterilizados de forma gratuita en 2023, con un problema de abandono de animales de compañía agravado por el paso de la pandemia por covid-19,  en octubre del 2022, la Secretaría Nacional del Medio Ambiente dio a conocer a través de sus redes sociales que, durante la Primera Jornada de Esterilización Masiva en Latinoamérica, México superó la meta global de hacer mil esterilizaciones con un total de mil 845 cirugías gratuitas practicadas a perros y gatos.

Asociaciones civiles y rescatistas rebasados por la problemática

Durante el evento inaugural de esta Primera Jornada de Esterilización Masiva en Latinoamérica, que se llevó a cabo en la alcaldía Coyoacán, el titular de la Agencia de Atención Animal (AGATAN), Carlos Esquivel, recordó que los 25 millones de animales que se encuentran en situación de calle en México, de estos, una buena cantidad nació en la vía pública, pero muchos otros fueron a dar a la calle por diversas razones. En este sentido, agregó que la autoridad ha identificado que estos animales han sido adquiridos en un local comercial, en un tianguis o por internet, con un tiempo de permanencia no mayor a tres meses “y después son abandonados en algunas zonas”, detalló.

Esta práctica constante ha llevado a México a ocupar el tercer lugar, a nivel América Latina, en maltrato animal, el primero en perros callejeros y a las organizaciones civiles, población y a los activistas de todo el país a tratar de tomar el problema en sus manos. En los últimos años, ha sido a través de las redes sociales que se ha podido observar el trabajo que muchas personas hacen por cambiarle la vida a estos animales y por generar empatía en la población mexicana. Tal como es el caso Orlando Pérez Alemán, mejor conocido en la plataforma de TikTok como “el señor rwuar rwuar”, creador de la Fundación Huellitas Alemán que tiene sede en Cancún.

Los videos de Orlando dan cuenta del arduo trabajo que realiza a diario recorriendo las calles del estado en su coche para alimentar a la mayor cantidad de perros y gatos que encuentra. De acuerdo con medios locales, Cancún registra más de 100 mil animales en situación de calle, una cifra que se ha podido observar a través de más de 303 videos que tiene el activista en su cuenta de TikTok.

Estos seres, además de un nombre, reciben, en donde quiera que él los encuentra, un plato de croquetas combinadas con un sobre de comida, así como una ración de agua embotellada. Algunos con mucha desconfianza, otros un poco más despreocupados, pero todos con el estómago lleno y el corazón contento, al terminar su comida vuelven a su vida nómada en el caluroso estado.

“¿Por qué no los adoptas?” es una de las preguntas que más le hacen al activista en todas sus redes sociales. Orlando Pérez Alemán ha explicado a sus seguidores que además de tener ya 10 perros en casa, lo que imposibilita de darle refugio a todos los perros que a diario alimenta es que no cuenta con un terreno de las dimensiones necesarias, razón principal por la cual inició la Fundación Huellitas Alemán.

Si bien Orlando no adopta a todos los animales que se encuentra en las calles de Cancún, cuando los perros o los gatos se encuentran heridos o en situaciones que ponen en riesgo su vida, él mismo se encarga de llevarlos al servicio de atención veterinaria para que reciban el tratamiento adecuado. Sin embargo, no siempre le ha sido posible llegar a tiempo para rescatarlos, como recientemente se pudo observar en la historia de Hércules, un perro que agonizaba en la vía pública cuando Orlando lo encontró y que, falleció por complicaciones de moquillo.

En los videos que publica Orlando Pérez Alemán también se puede observar que cuando un perro o un gato son abandonados, la edad no es un factor determinante para las personas; en 2023, una de las historias que más llamó la atención de los seguidores de la Fundación Huellitas Alemán en TikTok, fue el rescate de las tres cachorritas que, con pocas  semanas de nacidas, el activista encontró a un costado de la carretera con un letrero que decía “fuimos abandonadas”.

A diferencia de la historia de Hércules, la historia de “las babys ruawr ruawr” tuvo un final feliz, las tres encontraron un hogar, como muchos otros perros que Pérez Alemán ha puesto en adopción, y se encuentra en con una familia que les brinda todo el cariño y cuidados que requieren, una de ellas, con el propio Orlando.

Frente al problema de salud pública que representa la sobrepoblación de animales en situación de calle y la saturación de refugios, las autoridades de Cancún anunciaron desde 2023 una inversión de 5 millones de pesos para la construcción del Centro de Bienestar y Protección Animal de Benito Juárez, uno de los proyectos del Presupuesto Participativo 2023, para aplicarse en 2024, el cual se construirá en el antiguo Rastro Municipal de la avenida José López Portillo.

Otro activista mexicano que ha destacado en redes sociales por su gran labor es “Zadrigman”, un joven de 26 años que, vestido de superhéroe, en 2018 creó la organización “El hogar de Duke”, por medio de la cual se ha dedicado a rescatar a perros en situación de calle en la Ciudad de México, así como a visibilizar las condiciones en las que viven.

En 2023, fue él una de las figuras que más le dio difusión en la red social Instagram a la marcha que se llevó a cabo para exigir justicia por el asesinato de aproximadamente 21 perros, que además fueron desollados, torturados y abandonados en el bosque de Nativitas, ubicado en la alcaldía Xochimilco.

En este caso, hasta la fecha, no se han identificado responsables que paguen las condenas correspondientes; en la Ciudad de México, la ley establece que quien cause la muerte de un animal por maltrato puede enfrentar hasta 10 años de prisión y una multa de 500 Unidades de Medición (UMAs), unos 54,000 pesos.

El maltrato, crueldad, poner en peligro la vida o mutilar a un animal con fines estéticos puede resultar en una pena de uno a seis años de cárcel y abandonar animales en la vía pública puede conllevar una pena de cinco meses hasta un año de prisión.

En México, la lucha por los derechos de estos animales apenas inicia, sin embargo, a meses de que termine la actual administración, las autoridades federales mostraron su interés en este tema y el 30 de enero de 2024 en el Diario Oficial de la Federación (DOF) se publicó un decreto que modifica la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente para hacer posible la construcción de clínicas veterinarias públicas en todo el país.

Esta reforma coloca a los tres niveles de Gobierno como los responsables de supervisar que los estados, municipios y alcaldías garanticen la esterilización gratuita de animales de compañía,  para evitar más casos como Fortuna y Hércules, dos animales que tuvieron que ser sacrificados por no recibir atención veterinaria a tiempo, así como el trato digno en los centros de control animal, los cuales, tan solo en Ciudad de México, son los responsables de sacrificar, anualmente, de 30,000 a 180,000 animales que no vuelven a ser reclamados por sus dueños.

 

 

 

 

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