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La exportación de café se encuentra en un momento de alta sensibilidad. Los conflictos bélicos alrededor del Mar Rojo, dejan a Brasil como el principal productor. El precio en los bares de España e Italia son cada vez más costosos. Motivos, polémica y consecuencias de algo tan simple como beber una taza de café…
La situación de los buques de carga en el Mar Rojo es crítica. El caos que significa atravesar esa zona vía marítima se ha vuelto un dolor de cabeza para las empresas y el daño colateral se refleja en la logística, los gastos y por ende, en el precio de la materia prima, que termina desembocando, en el consumidor. “Los recientes ataques a buques comerciales que transitan por el Mar Rojo ya han empezado a perturbar las principales rutas marítimas. Así, se ha reducido la capacidad de las redes de suministro y ha aumentado la probabilidad de que se produzca un aumento considerable en los transportes”, afirmó el Banco Mundial en su último informe.
El Mar Rojo separa las costas de Egipto, Sudán y Eritrea de las de Arabia Saudita y Yemen. La escalada del conflicto de Palestina e Israel, provocó que los hutíes, organización política y militar en Yemen, haya comenzado a atacar buques comerciales que atraviesan el Mar Rojo. Si bien no hay heridos ni muertos, la tendencia es el secuestro de los buques y sus contenedores. En consecuencia, empresas como Maersk, Hapag-Lloyd y MSC han detenido o desviado sus buques.
Uno de los productos más afectados por esta situación es el café. En los últimos meses, los compradores de granos de café decidieron cambiar de productores: dejaron Vietnam para pasar a Brasil, lo que representa un aumento en combustible, costos y traslados para tener el café instantáneo. De acuerdo a Bloomberg, los granos que se iban a exportar en enero aumentaron un 30 por ciento y se cree que las tarifas se han multiplicado siete veces, ubicándose en los 4 mil dólares por contenedor.
El efecto cascada por este aumento desmedido y los problemas geopolíticos empezaron a verse en los precios de las cafeterías de Europa. Hoy en día, Italia tiene uno de los precios más altos por un simple café: 1,20 euros. Assoutenti (AU), Asociación Nacional de Usuarios de Servicios Públicos presentó un informe detallado de esta situación y marcó: “Comparando con hace dos años, hoy el café consumido en el bar cuesta en promedio un 11,5 por ciento más, pasando el espresso como media nacional de 1,04 euros en 2021 a los 1,20 euros actuales”.
“Los bares italianos se sirven alrededor de 6 mil millones de tazas al año, la facturación del espresso pasó de 6.240 millones de euros hace dos años, a casi 7.000 millones de euros en el último 2023”, sentenció Assoutenti. Sin embargo, Italia no es el único país que vive esto: España también.
Según informa el Instituto Nacional de Estadística (INE) en su página digital, el café se ha encarecido un 23 por ciento en apenas tres años y la situación está lejos de revertirse. En el país ibérico se suma otro factor tremendo que es la sequía vivida en los últimos meses. La producción del grano se vio afectada y esto hizo que el precio aumente y se vea reflejado en los supermercados, bares y restaurantes. Este incremento del 23 por ciento incremento llegó a alcanzar máximos históricos el último mes de febrero, según revela la Organización Internacional del Café (OIC).
“En España se consumen, de media, 44 millones de tazas de café cada día en los hogares españoles; y otras 22 millones de tazas de café se toman cada día en cafeterías. Cada español consume, de media, uno 3,81 kilos de café al año”, detalla Montse Prieto, Secretaria General de la Asociación Española del Café, al medio español, 20minutos. Para tomar dimensión de esto, España es el cuarto mayor productor de café tostado en Europa, pero la mayor parte del consumo llega por café importado ya que compra 395 mil toneladas al año y de zonas como Brasil, Vietnam y Etiopía.
“El entorno geopolítico actual no es ajeno a nuestro país y está implicando demoras e incremento de los costes del transporte marítimo; circunstancias que están afectando a numerosas materias primas, el café, entre ellas”, destacó Montse. Lo cierto es que algo tan simple como el café se ha convertido en tema de debate en los principales países de Europa. El problema en Mar Rojo no parece que vaya a solucionarse en el corto plazo, por lo que tomar una tasa de espresso, se ha convertido en un gusto para pocos…
