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El indicador alcanzó el mes pasado las 54.5 unidades, tras repuntar 4.3 puntos, la mayor tasa de los últimos 7 años, aunque con resultados contrastantes que pudieran apuntar a un pico y, consecuentemente, a un menor dinamismo del Sector Industrial para el primer trimestre de 2024.
El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) dijo el lunes que el IMEF Manufacturero avanzó el mes pasado en 4.3 puntos frente a febrero, con una velocidad no vista en los últimos 7 años, para alcanzar niveles de 54.5 unidades.
En contraste, el IMEF No Manufacturero, que refiere las actividades del Sector Servicios, decreció 0.6 puntos, aunque cerró marzo en terreno de expansión por 26 meses consecutivos, esto es, por arriba del umbral de las 50 unidades, para ubicar en 52.1. Los dos índices ayudan a prever, en el corto plazo, la trayectoria de las actividades secundarias y terciarías, los motores del PIB mexicano.
“Los resultados sugieren que el sector manufacturero repuntó al cierre del primer trimestre de este 2024, después de un débil inicio en los primeros dos meses.
“De esta manera, si bien marzo ha sido un mes con un sólido repunte en manufacturas, los primeros tres meses son contrastantes, y pudieran apuntalara un menor dinamismo en la industria”, advirtió la organización de afiliados financieros más grande del país.
Al presentar los resultados el lunes, el Instituto dijo que todos los componentes del IMEF Manufacturero, 5 en total, mostraron progreso; el componente de “nuevos pedidos” aumentó 2.6 puntos, pasando de 52.7 a 55.3 unidades, al igual que el de “producción”, que situó en 54.7, mientras que el del “empleo” se incrementó 1.4 puntos, en las 50.9 unidades, a décimas del umbral de sesgo negativo, considerado por debajo de los 50 puntos.
Por su parte, el subíndice de “inventarios” escaló en un solo mes 10.5 puntos, hasta 58.8 unidades y el de “entrega de productos” lo hizo en 2.5 puntos, alcanzando las 52.0 unidades.
El IMEF agregó que el índice relacionado con el Sector Servicios, a su vez, exhibió el mes pasado debilidad, donde sus 4 componentes mostraron malos resultados. De esta forma, los componentes de “nuevos pedidos” así como el de “producción” cayeron en 0.4 y 0.2 puntos cada uno, cerrando en 54.8 y 52.7 unidades respectivamente.
Sin embargo, el componente de “entrega de productos” mostró la caída mayor, de 2.8 puntos, registrando un nivel de 49.0 unidades, por primera vez en 12 meses en zona de contracción.
Finalmente, el subíndice de “empleo” dentro del Sector Servicios se mantuvo sin cambios respecto a febrero, con un nivel de 51.1 unidades.
“A pesar de que durante el mes que se reporta el desempeño del Indicador No Manufacturero ha sido menos dinámico, la mayoría de sus componentes continúan en zona de expansión, y llevan un tiempo prolongado en dicha zona”, anotó el IMEF.
Debilidad y riesgos
El Instituto dijo que el crecimiento en los Estados Unidos se mantiene sólido al arranque del 2024, incluso “con mejores cifras a lo esperado en el segmento manufacturero-industrial, el más vinculado a México”, en momentos en que la Reserva Federal revisó al alza su proyección económica de EUA en este año, de 1.4% hasta 2.1%, con una inflación que muestra “cierta rigidez” a la baja.
Pese a un entorno resiliente, en México, la tasa de crecimiento de las exportaciones totales continúa su ralentización, marcando un aumento de solo 1% a tasa anual en enero. La trayectoria de las importaciones replica ese comportamiento y reportó ese mes una contracción de 2.1%; “todo sugiere que el sector externo añade menos dinamismo a la actividad total, en contraposición con la retórica imperante sobre el nearshoring”.
El IMEF anticipa que el tema de triangulación comercial, que atañe además a EUA, el principal socio comercial del país y al gigante China, “se mantendrá latente”. Indica que en los doce meses a enero de 2024, la balanza comercial de México con los Estado Unidos fue superavitaria en 236,000 millones de dólares (mdd) mientras que el intercambio México-China reportó un déficit de 105,000 mdd.
Otro factor de riesgo es la pérdida de ritmo de la economía mexicana en enero, cuando el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE), clave para anticipar la trayectoria del PIB a corto plazo, retrocedió 0.6% en enero, por debajo de lo esperado por el consenso.
Las ventas comerciales también sorprendieron a la baja con un descenso mensual de 0.6% contra un avance del 0.3% esperado. El IMEF aseveró que esto “sugiere que es la demanda interna la que comienza a dar signos de debilitamiento, a pesar del incremento en salarios mínimos de comienzo de año”.
Respecto al desempeño de la inflación, el IMEF adelantó presiones, resultado de los efectos base de comparación en los precios no subyacentes, esto es, los más volátiles dentro del indicador general, los cuales junto “a los riesgos asociados a la sequía, sugieren una trayectoria ascendente para la inflación anual en el futuro cercano”, advirtió.
