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Patrick Mahomes, de los Chiefs, forma parte de un grupo de deportistas que anunció una inversión de 900 mdd en el equipo Alpine de la F1.
A su larga lista de inversiones en empresas deportivas, Patrick Mahomes —considerado el mejor jugador de la NFL según la propia liga— ahora sumará a la Fórmula 1.
El quarterback de los Kansas City Chiefs forma parte de un grupo de deportistas de alto nivel que ha decidido invertir 900 millones de dólares en el equipo Alpine —propiedad de Renault— que compite en la máxima categoría del automovilismo.
¿Quiénes acompañan a Patrick Mahomes en este proyecto?
Anote ahí a Travis Kelce, ala cerrada también de Kansas City —y sí, el novio de Taylor Swift—; el golfista Rory Mcllroy, ganador de cuatro torneos majors; el boxeador Anthony Joshua y el futbolista del Liverpool y de la selección inglesa Trent Alexander-Arnold.
Alpine —cuyos pilotos son Pierre Gasly y Esteban Ocon— está en el sexto lugar del campeonato mundial de constructores a más de 100 puntos de McLaren, que ocupa la quinta posición.
Se espera que esta inyección de capital muestre sus efectos en la siguiente temporada, ya que en el 2023 solo quedan unas cuantas carreras por disputarse, entre ellas el Gran Premio de la Ciudad de México, a finales de este mes.
Patrick Mahomes, de apenas 27 años, ha decidido invertir su fortuna en otros equipos profesionales.
El holding conformado por el quarterback —en asociación con su esposa Brittany— incluye, por principio, una participación en los Kansas City Royals del beisbol de Grandes Ligas.
También incluye participaciones en el Sporting Kansas City de la MLS, el Kansas City Current en la liga de futbol femenil —NWSL por su siglas en inglés— y las compañías Whoop, Hyperica, Biosteel y la cadena de hamburguesas Whataburguer también en la zona de Kansas City.
No hay que olvidar que, en el año 2020, Patrick Mahomes firmó un contrato por $503 millones de dólares, que se mantiene como el más grande para un deportista profesional dentro de los Estados Unidos.
Un año después, Patrick Mahomes declaró que “estoy tratando de construir un imperio, fuera del campo, en todo sentido”.
Al imperio del quarterback ahora se suma la Fórmula 1.
