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La Internet se ha metido de lleno en todos los aspectos de nuestra vida, en la escuela, la casa y lo mismo en el trabajo. Nuestros días tienden a hacerse bastante más cómodos al poder consultar información de un sitio al que vamos y, desde hace unos años, también nos auxilia mejorar nuestros gracias a que hay métodos con los que es posible ganar dinero por Internet.
Muchas personas están encontrando la manera de monetarizar lo que era en su inicio, probablemente, un mero pasatiempo. La comunicación tiene esa virtud, es útil en nuestras relaciones diarias, pero también puede lograr que una habilidad para conectar con los demás se transforme en una actividad pagada en Tiktok o el novedoso Olyfans.
Lo cierto es que se puede ganar dinero sin salir de casa y que esto no está limitado sólo a los carismáticos. De hecho, a la par del internet, el emprendedurismo de jóvenes empresarios está haciendo cada vez más común la atracción de pequeñas inversiones (y no grandes capitales) inyectados a negocios vanguardistas. Estos negocios emergentes se nutren a la inyección de recursos frescos de esos inversionistas de escala discreta, a cambio de lo cual ceden porcentajes de las ganancias mensuales que se generen.
En efecto, es el modelo de dividendos pasivos en los que una primera inversión generará ingresos mensuales sin que se deba hacer nada más.
Como puede verse, esto está a la mano de todo el mundo y no es tan especializado como el caso influencer, aquellas personas de las que hablábamos y que pueden generar dinero, incluso muchísimo, si ganan un renombre y lo ponen a trabajar a favor de patrocinadores.
Hay modelos incluso de corte académico en este tipo de negocios, como es el caso del español Sergio Martínez, quien creo en Youtube el canal Historias bélicas que merecen ser contadas y que sencillamente vende suscripciones a cambio de continuar realizando documentales sobre la segunda guerra mundial.
Como puede verse, los ingresos por internet tienen una flexibilidad notable y de que haya miles de canales relativamente desconocidos, pero que hacen una buena cantidad de dinero.
Por supuesto, para quienes tiene afición por la cocina o se dedican al sector restaurantero de manera formal, sería un desperdicio impermitible tener el tiempo para vender sus conocimientos y no hacerlo. Por supuesto, en ningún caso se trata de revelar secretos culinarios, pero enseñar a cocinar lo básico, dar cursos virtuales o ejecutar recetas con el patrocinio de algún fabricante de materias primas se está tronando común.
En realidad, como puede apreciarse, el dinero que nada en internet puede ser pescado a partir de innovaciones, de patrocinios para nuestras propias actividades o incluso gracias a que internet ha roto los límites de la inversión financiera tradicional, haciendo partícipes a personas con capitales discretos del mundo de la especulación y las apuestas financieras.
Es importante en todo esto recurrir a información sólida sobre los diferentes aspectos en cada caso, riesgos y potenciales beneficios, por lo que es recomendable echar un buen ojo a listados de negocios por internet como el que se coloco en un link al inicio de este articulo.
Internet ya está allí, lo que falta ahora es que nos decidamos a usarlo para nuestro bienestar económico.
