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Pese a incentivos fiscales, el CIIT no enciende el interés de desarrolladles inmobiliarios
Jonathan Pomerantz, director de Inversiones de Meor, explica que “en el sur del país todavía no tiene los precios de renta por metro cuadrado que hagan que para nosotros, con nuestro tipo de fondeo, sean proyectos rentables”.
Las últimas dos semanas, gran parte de la atención del presidente Andrés Manuel López Obrador se ha enfocado en el que será el principal proyecto de infraestructura de todo su gobierno: el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT).
Debido a este proyecto fue que decidió expropiar —aunque él llama rescate— los 120 kilómetros de vías férreas de Ferrosur e incluso este fin de semana realizará una gira de trabajo por la zona comprendida entre Coatzacoalcos y Salina Cruz.
Y una de las principales apuestas de este proyecto, es la apertura de diez parques industriales de 300 hectáreas cada uno; cuatro de ellos para la generación de energía eólica a cargo de la Comisión Federal de Electricidad.
Serán parques “con agua, gas electricidad y, algo muy importante: las empresas que se establezcan van a contar con apoyos fiscales”.
Es decir, “para decirlo sin medias tintas: subsidio. Van a pagar menos en IVA, en Impuesto Sobre la Renta, todo con el propósito de que ese corredor se desarrolle y haya empleo, trabajo para la gente”, señaló en la conferencia de prensa matutina de este viernes.
Sin embargo, a pesar de las ventajas, el proyecto no ha despertado el interés de los desarrolladores inmobiliarios, al menos en el corto plazo.
Jonathan Pomerantz, director de Inversiones de la compañía Meor —empresa que está desarrollando ocho parques industriales en el país con una inversión de 5,000 millones de pesos—, expone que la compañía respeta el impulso que el gobierno de López Obrador quiere darle al sureste del país.
“Desgraciadamente para nosotros, el día de hoy, todavía no están las condiciones para que podamos hacer un parque industrial por allá. Porque sí hay algo de falta de infraestructura y también porque los precios de la renta no han llegado al punto que necesitan llegar para que nosotros podamos tener un proyecto rentable”, explicó.
De acuerdo con el directivo “el precio de la construcción es el mismo, ya estés en Tijuana, en Ciudad Juarez, en Chiapas, en Oaxaca o en Mérida; lo que cambian son los precios de la renta por metro cuadrado”.
“Hoy en día —agregó— el sur del país todavía no tiene los precios de renta por metro cuadrado que hagan que para nosotros, con nuestro tipo de fondeo, sean proyectos rentables. Entonces, definitivamente, sí creemos que, con el impulso que le está dando la administración, se debe de desarrollar más el sur. Van a subir más rentas y, en cuanto eso suceda, podremos entrar en un proyecto por allá”.
Y concluyó que “hemos ido, lo hemos visto, lo hemos intentado, pero en este momento no están dadas las condiciones”.