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En febrero pasado, las actividades económicas del país mostraron un avance de 2.03% por arriba del nivel alcanzado en febrero de 2020, antes de surgir la Pandemia, lo que lo lleva además a lograr un nuevo máximo histórico
El Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE), clave para entender la trayectoria del PIB, creció en febrero 0.1 % en su medición mensual y con cifras desestacionalizas, apoyado en el progreso de 4.2% en las actividades primarias y de 0.7% en las secundarias o Sector Industrial, mientras que las terciarias, asociadas al Sector de los Servicios revirtieron la cifra favorable del mes previo y mostraron una contracción de 0.1%.
Al dar a conocer la información el martes, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) dijo que si la comparación se hace frente a febrero de hace un año, el Indicador mostró un crecimiento de 3.9%, en términos reales. Por grandes grupos de actividad, las primarias progresaron a un ritmo de 8.2% anual; el Sector de los Servicios, en 3.8% mientras que el Sector Industrial o de la Transformación avanzó 3.5%.
Con cifras originales, que vienen expresadas sin el efecto calendario y son las que incorpora el mercado para su análisis, el Indicador mostró un crecimiento de 3.8%, y donde las actividades primarias avanzaron 7.5%, el Sector Servicios, en 3.8%, en tanto que el Sector de la Transformación lo hizo en 3.5%.
Analistas resaltaron que las cifras de la actividad económica del segundo mes del año apoyan el pronóstico de que el dinamismo se sostendrá en el primer semestre del año, pese a las expectativas de que la restricción monetaria continuará, cerrando 2023 con tasas de crecimiento de 2%.
Grupo Financiero Banorte calificó el resultado como “bastante positivo” tomando en cuenta la expansión acumulada entre diciembre y enero, a un ritmo de 1%, y donde sobresalió el progreso observado en enero, de 0.6%.
Según Banorte, los catalizadores que influyeron en el resultado serían los fuertes fundamentales de consumo, la resiliencia en la demanda externa a pesar de señales de una desaceleración en algunos sectores clave de Estados Unidos, así como una moderación en la presión inflacionaria, así como “el continuo interés en el nearshoring”.
Banco Base dijo que considerando las cifras de enero y febrero y suponiendo un crecimiento de 0.1% mensual en marzo, el PIB de México habría crecido 0.90% a tasa trimestral en los primeros tres meses del año, dando como resultado un crecimiento “cercano al 3.4%” en su medición anual en el trimestre.
Con el avance reportado en febrero, el IGAE se situó 2.03% por encima del nivel pre pandemia y además logró un nuevo máximo histórico.
Gabriela Siller, directora de análisis económico de Base, apuntó que aún hay fuertes rezagos en la recuperación de los sectores de servicios básicos, que desplomaron en su comparación anual en 17.59%; servicios de esparcimiento y recreativos, en 3.89% y el de servicios de apoyo a los negocios, que se derrumbaron en 45.87% ante los desincentivos de la reforma de outsourcing.
