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En una transmisión en redes sociales, el presidente López Obrador anunció que el gobierno de Tayikistán compró la polémica aeronave en, aproximadamente 92 millones de dólares.
El que amenazaba con convertirse en el principal pendiente del gobierno de Andrés Manuel López Obrador finalmente se resolvió.
A pesar de haber sido rifado, el presidente anunció en una transmisión en vivo a través de redes sociales, que el polémico avión presidencial —el Boeing 787 encargado en el gobierno de Felipe Calderón y usado en el de Peña Nieto— fue adquirido por el gobierno de Tayikistán.
El director general de Banobras, Jorge Mendoza, explicó que el avión se vendió en 1,659 millones de pesos; es decir, aproximadamente 92 millones de dólares.
“Ya la transacción está cerrada, ya recibimos los recursos en su totalidad”, detallo el directivo, quien añadió que se logrará un ahorro de 332 millones de pesos de intereses por concepto de arrendamiento.
El presidente detalló que, con los recursos obtenidos se construirán dos hospitales en las zonas más pobres de México: Tlapa, Guerrero, y Tuxtepec, Oaxaca.
“Estamos contentos. Estamos como los nuevos ricos que compran un yate o un avión como este y son felices solo el día que lo estrenan y el día que lo venden”, dijo el presidente durante la transmisión.
Añadió que la próxima semana, durante la conferencia de prensa matutina de Palacio Nacional, se darán ,mayores detalles sobre esta operación.
“Ya nos quitamos este pendiente”, remató.
Durante el anuncio, acompañaron al presidente el secretario de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval; el director del Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado, Ernesto Prieto, y Jorge Mendoza, del Banco de Obras y Servicios Públicos (Banobras).