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“Todavía estoy revisando las concesiones que se entregaron a particulares en estos contratos de Asociación Pública Privada en hospitales, que resultan onerosos porque todo se privatizó”, adelantó el presidente.
El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que se están revisando los contratos de Asociación Público Privada surgidos desde el año 2012 y que permitieron la construcción de diversos hospitales en el país.
La Ley de Asociaciones Público-Privadas se publicó en el año 2012 y, en aquel entonces, diversos espartos consideraron que era un esquema positivo para el desarrollo de infraestructura hospitalaria ya que ofrecían mayor transparencia, una mejor rendición de cuentas y se cerraba la puerta a actos de corrupción contra el modelo tradicional de contratación.
De acuerdo con esa legislación, las asociaciones podían darse en diferentes modalidades como concesiones, contratos de prestación de servicios a largo plazo, obra pública financiada y sociedad de riesgos compartido.
Sin embargo, no existe un inventario de los contratos vigentes a nivel estatal y solamente es posible conocer los del orden federal.
En la conferencia de prensa matutina de este jueves, el presidente Andrés Manuel López Obrador se refirió al esquema como un posible foco de corrupción y aseguro que “todavía no termino de poner orden. Todavía, por ejemplo, estoy revisando las concesiones que se entregaron a particulares en estos contratos de Asociación Pública Privada en hospitales que resultan onerosos porque todo se privatizó”.
“Todavía me falta”, añadió. Sin embargo “logramos, por ejemplo, reducir el pago en tarifas de los gasoductos, logramos reducir el pago en los reclusorios que privatizaron; ahí nos ahorramos 10,000 millones de peso, como 2,500, 3,000 millones por año desde que hicimos la negociación, el nuevo acuerdo”.
De acuerdo con i formación de la Secretaria de Haciendo y Crédito Público, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) tiene dos contratos APP vigentes: uno por casi 2,300 millones de pesos para la construcción de un hospital de 180 camas en Tapachula, Chiapas, y otro por poco más de 2,000 millones de pesos para la construcción de otro hospital de zona de 144 camas en Bahía de Banderas, Nayarit.
El ISSSTE, por el contrario, tendría cuatro contratos vigentes: uno por 1,167 millones de pesos en Mérida, Yucatán; otro por poco más de 1,700 millones para un nuevo hospital en Villahermosa, Tabasco; otro por 1,858 millones de pesos en Tepic, Nayarit y un último por 3,481 millones de pesos para la construcción de un hospital delegacional en la Ciudad de México.
De acuerdo con Hacienda, “el monto máximo anual de gasto programable para los proyectos de asociación público-privada, asciende a la cantidad de $51,844.9 millones de pesos, de los cuales para el periodo 2023 se tiene estimado un monto de $12,538.4 millones de pesos”.
