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Al cierre de 2022, Petróleos Mexicano (Pemex) obtuvo resultados positivos no vistos en los últimos 10 años: logró un rendimiento neto positivo y tuvo inversiones récord.
En 2022 ejerció el mayor monto de inversión del que se tiene registro desde 2011: 467.3 mmdp.
De este monto, 61.3% fue ejercido por Pemex Exploración y Producción; 32.3% por Transformación Industrial (la que produce combustibles y petroquímicos) y el 6.4% restante por otras subsidiarias de la empresa.
La empresa estatal informó que al cierre del 2022 obtuvo un rendimiento neto de 23 mil millones de pesos (mmdp), un incremento de 318 mmdp respecto la pérdida neta de 295 mmdp de 2021.
Al respecto el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) explicó que, en un entorno global de altos precios del crudo, por primera vez en 10 años la petrolera obtiene una utilidad neta.
Pero los rendimientos no se sostuvieron
Sin embargo, “entre octubre y diciembre de 2022 la empresa reportó pérdidas por 172.6 mmdp”, monto cercano al presupuesto ejercido en 2022 por la Secretaría de Salud, 184.1 mmdp, agregó el IMCO.
Por otro lado, Pemex mantiene un patrimonio neto negativo, consecuencia de las pérdidas reportadas en años anteriores: sus pasivos (4.01 billones de pesos) casi duplican a sus activos (2.17 billones de pesos), explica el Instituto.
Además, destacó que Pemex Transformación Industrial registró una pérdida neta de 177.5 mmdp. Este resultado contrasta, por ejemplo, con las ganancias de Pemex Exploración y Producción por 189.1 mmdp.
Pemex informó un avance en la estrategia para disminuir su deuda, que registró un saldo de 107 mil 728 millones de dólares al cierre de 2022, una disminución de mil 282 millones de dólares respecto al año previo.
IMCO preciso que en un plazo de cuatro años –entre 2023 y 2026– Pemex deberá pagar el 46.6% (974.1 mmdp) de sus obligaciones financieras.
