Evaluar y hacerlo profesionalmente, el camino del éxito para nuestra empresa

empresas _ empresa

Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 34 segundos

Redacción

Lo que se puede medir se puede corregir. Esa es la premisa en la que se basó el buen desempeño de muchas empresas líderes en su campo. La razón es sencilla, pero implica una mentalidad perfeccionista: Cuando establecemos metas, medimos y detectamos desviaciones de nuestros objetivos trazados, estamos evaluando y poniéndonos a un paso de corregir los problemas que de manera normal surgen en proyecto.

Un sistema de evaluación de desempeño, por tanto, es algo en lo que un directivo debe pensar.

Los procesos de evaluación han existido desde hace muchísimo tiempo, pero la técnicas modernas permiten llevarlos a un nivel de detalle impresionante: ahora es posible detectar la afectación global en la empresa por un tema en particular y, evidentemente, proyectar los extras que lograríamos si lo solucionamos.

En efecto, un verdadero sistema de evaluación del desempeño ayuda a mejorar la productividad de los colaboradores y a crear una empresa o proyecto más fuerte. En contra de lo que se podría pensar a primera vista, evaluar apoya al equipo, cuando se aplica profesionalmente, ya que se trata de un servicio a nuestro equipo de colaboradores y nunca de un sistema de críticas o de reparto de culpas.

Pensémoslo bien y veremos que esto es así, pues al crear un centro de trabajo donde se logran objetivos, se incita a mejorar y se da importancia a la labor de cada elemento, en realidad estamos abriendo la puerta a que todos vean en el lugar una opción laboral de largo plazo, asociado a su futuro individual.

Hagamos patente que los primeros afectados de un proceso laboral que no está dando resultados son los mismos colaboradores inmiscuidos. Intentan, intentan y nada resulta, así que un trabajo externo, capaz de mirar sin la llamada ceguera de taller, podrá resultarles un verdadero alivio.

Buk, firma experta en estos temas, proporciona datos impresionantes, al grado de que reporta que los procesos de evaluación del desempeño han originado que más del 80 por ciento de los trabajadores que participaron en procesos evaluatorios indican que, después del mismo, su comunicación con los coordinadores de proyecto y directivos se hizo más eficinete y más fluida

Así se crean lugares de trabajo más felices.

A mitad de mercados muy competitivos, contar con conocimiento suficiente de  colaboradores es parte de las fortalezas necesarias para una empresa. Las entrevistas y cuestionarios deben estar diseñados con profesionalismo para que brinden este efecto positivo.

Como todo en la vida, al interior de una empresa puede haber cambios, pero estos deben darse sin afectar la capacidad para lograr metas.

Un habito ideal es la medición constante de logros y es también una buena forma para que las organizaciones detecten oportunidades comunes y descubran talentos entre sus miembros.

 

También te puede interesar: Ya lleva tiempo entre nosotros, pero ¿sabes qué es y para qué sirve tu Afore?