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En Qatar, Leandro Rodiguez, cobertura especial para Revista Fortuna
Todavía ni terminó la primera ronda de la fase de grupos y ya hay un partido que se lleva toda la atención. La Selección Argentina y la Selección de México se juegan todo el próximo sábado en un enfrentamiento que promete ser de lo mejor de la Copa del Mundo. Si Argentina pierde, quedará afuera del Mundial, mientras que, si México cae, su clasificación dependerá de un milagro futbolístico. Todo esto se desarrollará en la ciudad de Lusail, que hasta hace unos años no existía.
Cuando Joseph Blatter anunció que Qatar se quedaba con el Mundial 2022 derrotando a Estados Unidos en la votación, la ciudad de Lusail no existía, de hecho, apenas existe ahora porque recién se está comenzando a levantar. Las autoridades qataríes entendieron que debían extender la ciudad hacía el norte y por eso decidieron crear desde 2011, a la fecha, la ciudad de Lusail, que lleva invertido 45000 millones de dólares. El proyecto, que todavía sigue en pleno crecimiento está a cargo de Qatari Diar Real Estate Investment Company y el objetivo es que luego del Mundial, sea la parte más visitada de Qatar.
Lusail, hasta el momento, tiene una extensión de un millón de metros cuadrados, y ha sido apodada como la ciudad de entretenimiento de Qatar, la primera de este tipo en toda la región. Las autoridades pretenden que ese número crezca a pasos agigantados y pueda tener lugares de ocio, parques temáticos, campos de golf, 12 hoteles cinco estrellas, restaurantes y áreas comerciales.
Esta ciudad en pleno crecimiento contará con el mejor estadio del Mundial, que albergará la gran final del certamen el próximo 28 de diciembre. Lusail City, contará con, al menos, 450 mil casas para quien quiera mudarse antes o después del Mundial. El proyecto también se extiende al objetivo de construir un centro financiero, lujosas zonas residenciales, playas de arena blanca y puertos deportivos para atracar más de 1800 barcos y yates de lujo.
Lusail se encuentra a 20 kilómetros de Doha, tiene su propia estación de metro y pretenden que sea la zona más pluricultural de Qatar luego de la Copa del Mundo. Para sostener esto, Qatar invirtió la cifra marcada antes: 45000 millones de dólares. El deseo de agigantar la ciudad es tal que luego del Mundial, el Lusail Stadium sería desmontado para levantar un proyecto inmobiliario.
El estadio Lusail costó 860 millones de dólares. La forma y la fachada tienen motivos decorativos como cuencos y otros recipientes característicos de la edad de oro del arte y del artesanado del mundo árabe-musulmán. En un principio, Argentina y México se iban a enfrentar en un estadio más pequeño, sin embargo, la expectativa fue tan alta que se cambió al Lusail por 80 mil espectadores. El morbo está servido. Una ciudad millonaria, nueva y una ‘final’ por jugarse.