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Tomás de la Rosa / @TomásdelaRosa
El incremento generalizado de precios volvió a sorprender al mercado con un 8.8% en el promedio nacional, aunque las amas de casa tuvieron que pagar más de 80% por cebollas y papas, 50% más en tomates y naranjas, y más de 30% en la harina de trigo y huevo. Para algunos especialistas el espiral inflacionario es “alarmante” y requiere de la mano dura del Banco de México (Banxico) para contener la fuerte pérdida del poder adquisitivo de las familias que no se había visto en los últimos 21 años, por lo cual se requería un incremento jamás visto de 100 puntos base a la tasa de interés.
“En nuestro país la amenaza inflacionaria crece desde niveles que en sí mismos ya son alarmantes (…), el riesgo de que el panorama siga deteriorándose no es menor”, señaló Marcos Arias, economista del Grupo Financiero Monex.
Con 37 quincenas con inflación por arriba del objetivo máximo de Banco de México que es de 4.0%, van 15 quincenas consecutivas con más de 7.0% y en las últimas seis quincenas la inflación supera el 8.0%, algo no visto en 21 años.
La inflación de las dos primeras semanas de septiembre sorprendió a la mayoría del mercado por ser mayor a lo esperado.
“Tal como se esperaba, la inflación resultó mayor a ‘lo esperado’. Anual en 8.8%, la subyacente alcanzó un nivel de 8.3%, no visto en años. Me parece que @Banxico debe dejar a un lado sus temores y recetar (un incremento de) 100 puntos base la próxima semana. Espero que lo hagan. Ahora es cuando”, comentó el execonomista en jefe para América Latina en el banco inglés Barclays, Marco Oviedo.
En la misma línea de Oviedo, de que Banxico en su próxima reunión de política monetaria del 29 de septiembre decrete una alza de un punto porcentual (100 puntos base) a la tasa de interés está la economista en jefe del regiomontano Banco Base, Gabriela Siller, y Marcos Arias de Monex.
Arias fue enfático al precisar que “algunas señales sugieren que la dinámica de precios está lejos de controlarse Así, la tendencia de la inflación subyacente es preocupante, pues sigue registrando máximos históricos y en septiembre se perfila a mostrar el mayor dato mensual en lo que va del ciclo”.
El pronóstico de Siller de Banco Base es que en septiembre, la inflación mensual anualizada sea de 8.82%, para octubre de 8.86%, para noviembre de 8.78% y para el mes de las fiestas navideñas de 9.17%.
Según Oviedo, la tasa de interés objetivo de la política monetaria podría cerrar el año en “por lo menos en 10.50%” y con una inflación del orden de 5.0% en 2023, la “tasa (de interés) a 11.0%, mínimo por un periodo largo”.
AMARGA MEDICINA
Previo a que el Inegi diera a conocer el dato de inflación, Citibanamex publicó su encuesta de expectativas y señaló que 32 de 33 economistas nacionales y extranjeros consultados esperaban que la próxima semana Banxico incremente 75 puntos base (0.75 puntos porcentuales) la tasa de interés. Esto debido a que el mandato del banco central, establecido en el artículo 28 constitucional, es “procurar la estabilidad del poder adquisitivo” del ingreso de las familias.
En esas 37 quincenas, la pérdida del poder de compra promedio del dinero en el país es de 12.1%. Es decir, lo que una ama de casa compró con 100 pesos en la primera quincena de marzo de 2021, en las dos primera semanas de septiembre (el mes del pozole) de 2022 pagó más de 112 pesos. Es importante precisar que eso es un promedio porque la pérdida del poder adquisitivo depende de los bienes y servicios que se compren, la localidad y el nivel de ingresos de las familias.
Derivado del mandato constitucional de Banxico, en las dos reuniones de política monetaria más recientes (junio y agosto de 2022) aplicó lo que para las familias fue una medicina amarga, incrementos de 75 puntos base a la tasa de interés objetivo (tasa primaria o tasa de interés interbancaria) para tratar, sin éxito, contener la inflación.
Es importante señalar que desde el banco de bancos (Banxico) utiliza la tasa de interés como herramienta de política monetaria para tratar de defender el poder adquisitivo de las familias, desde hace 14 años (enero de 2008) nunca se incrementó 75 puntos. Así la tasa de interés pasó de 7.0% a 7.75% desde junio pasado y luego otra cucharada de la misma proporción para quedar en 8.5%.
Derivado del mayor costo del dinero, con la política monetaria restrictiva del banco central con tasas de interés mayores, se impacta el crecimiento de la economía por el efecto restrictivo en el consumo, la inversión. Esto afecta las finanzas personales, las del gobierno y las de las empresas por el encarecimiento del crédito.
Como señala Banxico, la inflación desbordada genera una mayor incertidumbre que afecta la planeación porque dificulta la evaluación y puesta en marcha de proyectos de inversión. En suma, impacta en el mediano y largo plazos el crecimiento económico y la generación de empleos y por ende del consumo, pago de impuestos, entre otros.
Pero según los expertos, la amarga medicina de las mayores tasas de interés y su impacto en la economía es mejor que ante la inflación desbordada pone en riesgo el proceso de formación de precios, lo cual tendrá mucho mayor impacto en la misma inflación, consumo e inversión.
AMS DE CASA EN APUROS
En las dos primeras semanas de septiembre, en plena preparación de la comida típica para celebrar la independencia de México, las amas de casa pagaron respecto del mismo periodo de 2021 más por la cebolla, para el caso fue 87% más. Por las papas y otros tubérculos desembolsaron 81% más, por el tomate verde para las salsas pagaron 55% más, 36% más por el huevo y 48% más por las naranjas.
Para los buñuelos, se pagó 39% más por el harina de trigo, 30% más por el pan blanco, 24% más por las tortillas de harina de trigo, 22% más por el pan dulce y 15% más por las tortillas.
Lo anterior, Arias de Monex lo explica. Del reporte de precios, “la sorpresa vino principalmente del lado de la inflación subyacente, pues aportó 80% del movimiento quincenal” de la inflación. “Al interior, fueron nuevamente las mercancías alimentarias las que más incidieron”, detalló.
Para el economista, además de los efectos de la guerra de Rusia contra Ucrania, si bien algunos productos todavía “no tiene incrementos tan escandalosos, la mayoría se encuentra creciendo por encima de su tendencia histórica y lejos de los niveles compatibles con el objetivo de Banco de México”.
Esos objetivos son una inflación de 3.0%, con un más/menos 100 puntos base para quedar en un rango inflacionario de entre 2.0% y 4.0%.
Arias resaltó también el incremento de precios en los servicios que crecieron a tasa anualizada de 9.0%, lo “que es prácticamente el doble del alza promedio de los dos años previos”.
En suma, la amarga medicina que representa el mayor costo del dinero, es necesaria para contener el desbordado incremento de precios.
Para entender el término de inflación subyacente, Banxico la define como el incremento de los precios de un subconjunto de bienes y servicios en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) cuyos precios no están sujetos a decisiones de carácter administrativo, estacionalidad o alta volatilidad.
Es decir, la inflación subyacente (core inflation) refleja la tendencia de la inflación general y para su medición excluye los productos más volátiles como son energéticos y alimentos no elaborados.