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El dato inflacionario de la primera quincena de agosto, su mayor marca para una quincena igual desde 1998, hizo mover la expectativa de cuando menos 27 grupos financieros
El récord alcanzado por la inflación en la primera quincena de agosto, a una tasa de 8.62% anual y contra el consenso del mercado de 8.51%, sacudió las expectativas de los grupos financieros del país, para quienes ahora habrá una política monetaria todavía más restrictiva, con tasas de interés que podrían alcanzar niveles de 10% al término de este año.
El más reciente consenso del mercado apuntaba un incremento de 50 puntos base (pb) en la tasa de interés referencial durante la reunión de la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) programada para el próximo 29 de septiembre, desde el 8.50% actual. Ahora la perspectiva cambia y la apuesta es de un incremento de 75 pb, para alcanzar niveles de 9.25% hacia esa fecha.
El dato de la carrera de precios reportada en la primera quincena de agosto, de 0.42% a tasa quincenal, el mayor nivel registrado para una quincena igual desde 1998 y que supera en 2.2 veces el promedio histórico alcanzado entre 2003 y 2021, hizo mover las expectativas de cuando menos 27 grupos financieros.
“Cuando comenzaba a asentarse la idea de que la inflación llegaba a su punto de quiebre, el dato de la primera quincena de agosto ofrece argumentos para pensar en que las presiones se mantendrán más tiempo de lo estimado”, apuntó Daniel Arias Novelo, del Grupo Financiero Monex.
En los primeros 15 días de agosto, el índice más sensible de precios, la inflación subyacente, la cual marca tendencia, creció en 0.49% a tasa quincenal, para una tasa anual de 7.97%, superando también todo pronóstico, y donde el consenso esperaba un incremento de 0.35% quincenal y de 7.82% anual.
En tan sólo dos semanas, al interior del índice subyacente y a tasa quincenal, es decir, respecto a la segunda quincena de julio, los precios de las mercancías se incrementaron en 0.72%, mientras que los de servicios lo hicieron en 0.22%. El índice de precios no subyacente, aquel que representa precios volátiles como los de la Energía y la Agricultura, subió 0.22% quincenal y a 10.59% a tasa anual, lo que resultó en línea con la expectativa del mercado, de 10.60%.
“La inflación anual ya se ubica en 8.62% y no descartamos que se acelere a cerca de 9.00% en septiembre”, mencionó Ricardo Aguilar Abe, economista en jefe de Grupo Financiero Invex, que considera que en septiembre justo se marque el máximo anual de inflación, aunque el pronóstico enfrenta riesgos de alza.
El estratega señala que entre los principales factores para que la inflación descarrile más destaca la inestabilidad en los precios internacionales de materias primas y productos agropecuarios, por los estragos de la guerra en Europa del Este, además de la sequía en algunas regiones productoras, y donde el repunte en los precios del gas natural derivado del conflicto geopolítico es una noticia negativa para la inflación en México.
La casa de bolsa Finamex destacó a su vez que un contexto en el que la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) reduce el ritmo de incrementos en su tasa de interés en futuras decisiones de política, las “lecturas de inflación negativas adicionales en México podrían dificultar que Banxico iguale dichas decisiones”.
“Por el momento, mantenemos nuestra expectativa de que ambas autoridades monetarias incrementarán sus tasas de referencia en 50 puntos base (durante) septiembre.
“No obstante, comenzamos a ver mayores probabilidades de que Banxico anuncie un aumento adicional de 75 puntos base”, agregó la dirección de análisis económico de la firma de corretaje.
Los incrementos de precios más fuertes de la quincena estuvieron liderados por la cebolla, con una escalada de 37.66%, seguido de las loncherías, fondas, torterías y taquerías que por su ponderación en el índice general exhibieron un avance de 0.73%; bajo ese criterio, la tercera y cuarta posición correspondió a los precios de la tortilla de maíz y los de las universidades, con aumentos de 1.19% y 1.41%, en cada caso.
Aunque el índice general reportó un incremento de 0.42% que rebasó toda expectativa, varios estados de la República superaron este récord: a tasa quincenal, la inflación en Puebla y San Luis Potosí alcanzó niveles de 0.74% y 0.70%, respectivamente, mientras que Sinaloa y Yucatán exhibieron un avance en materia de precios de 0.69%, seguidos por Chiapas, con una tasa de 0.65%.
Coca Cola y más
Un reporte del banco Banorte anota que la inflación subyacente será la que tome más tiempo “en caer”, en momentos en que más empresas anuncia alzas adicionales en el precio de sus productos, donde destaca el caso de Coca Cola FEMSA (KOF) que comunicó que los refrescos y otras bebidas aumentaron a partir del 17 de agosto, lo que se suma a una acción similar que había ocurrido en la primera quincena de junio.
El productor de lácteos Grupo Lala aumentó por su parte precios, en 1 peso en promedio, en varios de sus productos, desde el 15 de agosto.
“Como hemos dicho antes, creemos que estos movimientos reflejan presiones en costos, en especial –pero no exclusivamente– en alimentos”, apuntó Banorte, que resalta que otro catalizador clave para medir la trayectoria inflacionaria será el aumento al salario mínimo en 2023, que viene de un alza de 22% programada para este año.
El banco recuerda que la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (CONASAMI) busca actualizar el objetivo para el cierre de 2024 ante las presiones en los precios de mercancías y servicios, desde el nivel vigente de 226 pesos por día, hasta los 260 pesos diarios. Lo anterior implicaría un crecimiento en materia de salarios mínimos de 50.4%, en tan sólo dos años.
“Dadas las fuertes presiones en costos en otros frentes, la decisión podría ganar inclusive más relevancia para la trayectoria de la tasa de referencia el próximo año. En general, el panorama sigue siendo complicado”, externaron Alejandro Padilla, Juan Carlos Alderete y Francisco Flores, de la dirección de análisis de Banorte.
Grupo Financiero Base dijo que mantendrá sin cambios su previsión de inflación al cierre del año, de 8.7% anual, uno de los niveles más altos del mercado y frente a un consenso que apunta a un 8% para el término de 2022.
“Asimismo, es probable que Banco de México siga subiendo su tasa de interés, hacia un nivel entre 9.5 y 10% al cierre del año”, indicó Base.