Estanflación, ¿la nueva normalidad? Citibanamex espera que PIB crezca 1.3% en 2022

Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 58 segundos

Para Citibanamex, el conflicto entre Rusia y Ucrania debilita aún
más las perspectivas de recuperación económica de México y añade leña a una
inflación ya muy elevada que, probablemente, impulse una mayor restricción monetaria
por parte de Banxico y terminará deteriorando las finanzas públicas

-¿Hasta qué punto?, se preguntan los analistas de Citibanamex

En las últimas semanas, recuerdan, se ha discutido opiniones preliminares sobre
cómo las tensiones geopolíticas en Europa del Este podrían afectar las perspectivas
macroeconómicas de México.

A pesar de la gran cantidad de nueva información relevante —incluida la posibilidad de un avance en las negociaciones de Rusia-Ucrania y cierta reversión en las alzas de precios de las materias primas, el primer aumento por parte del Banco de la
Reserva Federal y sus mensajes “halcones”, así como la más reciente actualización de
nuestros pronósticos económicos a nivel global—, las perspectivas de Citibanamex permanecen sin cambios en lo general.

Los analistas de Citibanamex informaron hoy que el grupo sometió a revisión el marco macroeconómico para la economía mexicana durante 2022.

Para el crecimiento del PIB, Citi considera que en 2022 la dinámica será de 1.3% y 2.0% en 2023 (1.7% y 2.1% anteriormente).

Las revisiones se explican, según los analistas de Citi, principalmente por posibles disrupciones en las cadenas de suministro y una menor demanda externa, con algunos efectos adicionales en el  consumo y la inversión debido a inflación y tasas de interés más altas.

Respecto a las finanzas públicas, Citibanamex proyecta ahora un aumento del
déficit primario a 0.8% del PIB, mayor tanto que su estimación anterior de 0.4% como que la meta de Hacienda de 0.3% del PIB. Dicha estimación considera el costo fiscal atribuido a los subsidios gubernamentales a la gasolina, que estima en 350 mil millones de pesos, o 1.2% del PIB.

Ahora, Citibanamex estima la inflación general y subyacente en 6.0% y 5.8% anual al cierre del año.

Las revisiones del banco estadounidense incorporan precios más altos esperados de las materias primas.

A diferencia de otras economías, en México la inflación de los combustibles no es una gran
preocupación debido a la política de subsidios del gobierno.

“Estimamos que Banxico continúe ajustando su tasa de política en incrementos de 50 puntos base, al menos mientras la inflación subyacente no alcance su pico. Así, vemos aumentos de 50 puntos base tanto en marzo como en mayo, y luego 25 pb en cada reunión posterior hasta diciembre”, indicó.

Así, establece el banco,  la tasa terminal en 8.25%, pero los riesgos claramente son al alza.
Pensamos que los factores clave para Banxico incluyen la evolución de la inflación subyacente y de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo.

Las posibles turbulencias en los mercados financieros, y en particular en la cotización del peso, también serán relevantes.

Citibanamex considera que la trayectoria de la Fed será relativamente menos importante para las decisiones de Banxico sobre ajustes a la política monetaria reunión por reunión, si bien sí será importante en la determinación del nivel de la tasa terminal.

Respecto a la inflación Citibanamex revisó al alza sus expectativas  de largo plazo a 4.0% desde el 3.7% anterior.

“Nuestras expectativas en torno a que las tasas mensuales de inflación se ubiquen por
debajo de sus promedios históricos en el corto plazo no son optimistas —y al mismo tiempo
pensamos que Banxico se mantendrá poco comprometido a hacer que la inflación
efectivamente converja a su meta puntual, como ha sido históricamente el caso—. Las
presiones inflacionarias se mantendrán elevadas durante mucho tiempo, en nuestra opinión”, indicó.