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De acuerdo con el presidente, el programa de apoyo a la petrolera mexicana no pone en peligro ni las obligaciones del gobierno ni los proyectos prioritarios de la actual administración.
En el reciente plan de apoyo a Petróleos Mexicanos (Pemex) la secretaría de Hacienda y Crédito Público anunció una disminución de 52 a 40% en la tasa del Derecho de Utilidad Compartida (DUC), una de las principales fuentes de ingresos públicos.
Esta mañana, en la conferencia de prensa matutina de Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que esta carga fiscal todavía puede bajar más.
López Obrador recordó que el programa de apoyo a Pemex —dado a conocer por Hacienda la semana pasada— tiene, entre otros objetivos, contribuir a que la deuda de Pemex disminuya en 20,000 millones de dólares.
Rechazó que el programa —que también incluye una inyección de recursos por 3,500 millones de dólares— represente una presión a las finanzas públicas o a los proyectos prioritarios de esta administración.
“Eso sí les puedo decir: tenemos ya autorizado el presupuesto para el año próximo. No tenemos ningún faltante, todos los proyectos —como el Tren Maya, la Refinería Olmeca y el Aeropuerto Felipe Ángeles— tienen presupuesto suficiente”, aseguró.
“Y en el caso de que faltara, alguna dependencia del gobierno federal —agregó—, sobre todo las que tienen que ver con proyectos prioritarios, se hacen transferencias y se les apoya. A Pemex periódicamente le estamos quitando impuestos para que tengan más fondos”.
Al presidente se le recordó que el plan de apoyo contempla reducir a 40% la carga fiscal de Pemex a lo que respondió “y podemos bajar más”.
“Debe de quedar muy claro de que, a diferencia de la política neoliberal, ahora Pemex es una empresa protegida, apoyada, respaldada, por el gobierno de la república. Es lo mismo que la Comisión Federal de Electricidad”, sostuvo.
Por Raúl Castro-Lebrija
