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Expertos aseguran que el sector industrial tendrá un crecimiento limitado en los próximos años, lo que implicará menores inversiones en renglones como la construcción, minería, y la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, así como el suministro de agua y gas al consumidor final.
De hecho, los niveles pre–Pandemia en la actividad industrial ocurrirán hasta el 2022, una vez que surja una etapa de “rebotes” o mejoras en la economía mexicana, previstos para la primera mitad de este año.
“La industria nacional se encuentra bajo el fuego cruzado”, expone José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC) en un reporte emitido este lunes.
De cara a los datos más recientes de la Actividad Industrial de México, que reportó un inesperado avance mensual de +1.1% en noviembre, pero cuya tasa anual sentó una caída de -3.3%, el analista aseveró que las oportunidades se desprenden de una recesión sin precedentes acelerada por la Pandemia, pero también de acciones que han implementado otros países para rescatar sus economías, contra lo hecho por México.
Mientras que países como Brasil y Chile han destinado estímulos fiscales por el equivalente al 8% y al 6% de su PIB respectivo, México apenas roza el 1%.
Con los resultados dados a conocer este lunes por el Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (INEGI), la Actividad Industrial del País acumuló un desplome de –10.7% hasta noviembre pasado.
De la Cruz señala que entre enero del 2001 y noviembre del 2020 el promedio de crecimiento anual del sector industrial apenas rozó el 0.2%.
La magnitud de la recesión económica asociada a la Pandemia, sin precedentes en más de 80 años, se traduce en una disminución de medio punto porcentual en el modesto promedio de crecimiento industrial contabilizado en casi 20 años.
“Creemos que la situación de corto plazo sigue siendo bastante compleja, todavía altamente dependiente de las condiciones en torno a la Pandemia”, dijo por su parte banco local Banorte en un análisis emitido el lunes respecto a los resultados de la Actividad Industrial de noviembre.
En diciembre pasado, las condiciones epidemiológicas continuaron deteriorándose, con más entidades federativas que pasaron de “naranja” a “rojo” en el semáforo epidemiológico, donde sobresalen los casos de la Ciudad de México, el Estado de México y Baja California.
El análisis de Banorte señala que considerando el plan de vacunación presentado por el gobierno federal, el cual comienza con las personas de mayor edad y progresivamente tiende a grupos más jóvenes, “probablemente limitará el ritmo de la recuperación en la primera mitad del año, mostrando una aceleración más significativa al menos hasta el segundo semestre de 2021”.
“La recesión asociada al Covid-19 ha erosionado las oportunidades de desarrollo económico y social…México deberá actuar con eficacia y eficiencia en la elaboración y ejecución de una ruta crítica que considere a detalle los cambios que están ocurriendo.
“Sin ello la ilusión de un crecimiento positivo en 2021 podría ser un espejismo que cause una recaída a partir del 2022”, advirtió por su parte de la Cruz.
