Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 6 segundos
Entre julio y septiembre pasados, la economía de México exhibió una fragilidad menor apoyada en la operación de empresas de mayor tamaño, que son las que se recuperan con mayor rapidez de los impactos provocados por la Pandemia del Covid-19, anticiparon expertos.
“Son las que están recuperándose con mayor rapidez del choque adverso sin precedente que implicó la Pandemia”, señaló el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) en su ejercicio Indicador IMEF, un índice adelantado sobre el desempeño de los sectores de la Manufactura y el de Servicios, claves para medir el comportamiento del PIB del País.
El Indicador IMEF Manufacturero avanzó en septiembre 1.1 puntos, para ubicarse en 46.4 unidades, por lo que permaneció en zona de contracción (menos 50 unidades) por 16 meses consecutivos. A su vez, el Indicador IMEF No Manufacturero reportó en septiembre un aumento de 2.6 puntos, cerrando en 49.3 unidades, en zona de contracción por octavo mes consecutivo.
“Las cifras del indicador IMEF Manufacturero y No Manufacturero de septiembre mostraron mejoras respecto a agosto, si bien ambos índices se ubican todavía en zona de contracción”, explicó el organismo.
Las mejoras más notorias correspondieron al Sector no Manufacturero, o Servicios, que se encuentra más cerca de llegar al umbral de 50 puntos, sobre todo al ponderar por tamaño de empresa, explicó el IMEF sobre esta metodología propia de índices adelantados, reconocida a nivel nacional.
Por su parte, el Sector Manufacturero, se encuentra más lejos del umbral, pero al ponderar por tamaño de empresa, ya se encuentra en expansión, explicó.
Durante septiembre, tres de los componentes del Indicador
En sentido contrario, dentro del Indicador Manufacturero, el subíndice Nuevos Pedidos disminuyó 0.3 puntos, para cerrar en 44.2, en tanto que el subíndice Entrega de Productos cayó 1.7 unidades, para ubicarse en 45.0.
En cuanto al Indicador No Manufacturero, o de Servicios, cuatro de sus subíndices reportaron incrementos durante septiembre, donde destacó el avance de 5 puntos del subíndice Nuevos Pedidos, para llegar a 49.9 puntos.
Dentro del Indicador No Manufacturero, el subíndice Producción, por su parte, creció en septiembre 2.9 unidades, para cerrar en 48.6; el subíndice Empleo aumentó 2.4 unidades para llegar a 46.4 puntos, en tanto que el subíndice Entrega de Productos aumentó 0.6 unidades, para cerrar en 52.1 unidades.
Falta músculo
Las perspectivas sobre la evolución futura de la economía de México, y del mundo, se encuentran sujetas a un alto nivel de incertidumbre.
Factores como los plazos para el desarrollo y la distribución de vacunas y tratamientos contra el Covid19, o la frecuencia e intensidad con que se presentarán rebrotes de la enfermedad serán los principales determinantes de lo que suceda con la economía en el mediano plazo, alertó el IMEF.
“Los indicadores económicos más recientes muestran que el impacto más severo de la pandemia ya pasó y ha iniciado una reactivación paulatina”, planteó.
Sin embargo, el organismo asevera en su informe publicado hoy que el País resiente factores desfavorables para una recuperación plena de su economía.
“El entorno para la inversión continúa desfavorable y miles de empresas habrán desaparecido ante la ausencia de medidas gubernamentales para proteger su liquidez durante la etapa más severa de la recesión.
“Con ello, el país habrá perdido un músculo importante para la recuperación”, advirtió.
Anterior a la epidemia que ha paralizado la economía global, la economía mexicana venía ya mostrando signos de desaceleración, cerrando 2019 con una contracción de 0.1% de su PIB, su primer revés en una década. El Banco de México pronostica que al cierre de 2020, el PIB de México podría hundirse en cerca de -13%.