Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 15 segundos
El saldo del primer semestre de 2020 arroja que hacia la segunda mitad del año habrá mayores presiones fiscales, un mayor déficit comercial y un aumento en la deuda pública. Expertos también anticipan un mayor desgaste de las expectativas de la economía.
Hasta abril, ya cuantificado el primer mes de aislamiento sanitario y económico debido a la pandemia, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) reportó que se obtuvieron 1 billón 869 mil millones de pesos (mmdp) de ingresos totales.
Un ejercicio del think tank México Evalúa indica que sin tomar en cuenta la compensación que representó la recuperación de recursos de fideicomisos por 53 mil millones de pesos (mdp) y transferencias a Pemex por 26 mil mdp, los ingresos no compensados o recurrentes sumaron 1 billón 789 mmdp, esto es, 79 mil 500 mdp por debajo de la meta de la autoridad.
La deuda pública creció en términos porcentuales de 42.8% del PIB de abril de 2019 a 49.6% en el cuarto mes de este año. La expectativa es que al cierre de 2020, la deuda pública sea equivalente a 52.1% del PIB.
Un informe mensual de perspectiva de inversión de Citibanamex correspondiente a julio dice que es probable que el deterioro de las expectativas de crecimiento para este año persistan “ante una acción muy acotada que han venido tomando las autoridades en materia fiscal para afrontar la pandemia”.
Hasta el momento, el paquete de estímulos fiscales destinado por el gobierno en respuesta a la crisis sanitaria y económica es de 0.7% del PIB, sólo por debajo de los apoyos que han otorgado Honduras, Nigeria o la isla Mauricio. Se coloca también detrás con los incentivos de otras economías emergentes como Argentina (2.5%) o Chile, de 3% del PIB.
“De no añadir al menos 1.5% adicional, es muy factible esperar que la contracción que estamos proyectando este año (de -9% estimado) sea incluso de dos dígitos (-10.5%)” dice Citibanamex.
La posibilidad de que México pierda el grado de inversión es actualmente es baja, de acuerdo con expertos.
En lo que resta del año, el peso mexicano se mantendrá volátil con una expectativa hacia fin de año de 22.70 por dólar de acuerdo a la mediana de 23 participantes de la más reciente Encuesta de Expectativas de la filial de Citigroup.