Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 25 segundos
El hundimiento de las economías de América Latina será más severo en el periodo abril, mayo, junio de 2020, con una caída trimestral anual de cerca de 30%, lo que significará el peor periodo de la crisis relacionada con el Covid-19, anticipó la agencia de riesgos S&P Global en un análisis distribuido este lunes.
“La contracción anualizada en el segundo trimestre será 3 veces tan severa (en cerca del 30%), como el peor trimestre durante la crisis financiera mundial, que, para la mayoría de las economías de América Latina fue el cuarto trimestre de 2008, o el primer trimestre de 2009”, dijo la agencia, que además de las repercusiones económicas por las estrictas medidas locales de distanciamiento, menciona aquellas adoptadas por los socios comerciales clave, como las de México con Estados Unidos.
En línea con lo que anunció el viernes pasado, S&P Global estimó que la recuperación en México, la segunda economía más grande de la Región, será más lenta que sus pares, con una debilidad económica que ya era una realidad antes de la Pandemia, pero que la llegada del virus agudizó.
La calificadora enumeró eventos que dejan mal parado al país, entre ellos, los retrasos en las medidas de contención del virus, pues generarán riesgos de que se prolongue la crisis de salud, o la limitada respuesta en cuanto a la política económica, lo que significará más tiempo para reparar el daño en el mercado laboral y en la dinámica de las inversiones principalmente.
”Prevemos una recuperación desigual en América Latina, con recuperaciones más fuertes en economías como la de Chile y Perú, donde las políticas más efectivas para contener el brote del virus y las robustas respuestas económicas ayudarán”, agregó S&P Global.
Con una economía 5 veces menor a la de México, el gobierno de Perú anunció desde las primeras repercusiones de la Pandemia un programa con estímulos por 26 mil millones de dólares, que analistas de ese país calcularon al 9% del PIB nacional. México acaba de adoptar la semana pasada apoyos por el equivalente al 3% de su PIB, mientras el Banco Central hizo anuncios independientes por un análogo al 3.3% del PIB del país.
S&P Global Ratings dijo en su informe que distribuyó el lunes que llevó a cabo otra ronda de revisiones a la baja a nivel mundial sobre el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), conforme las medidas de distanciamiento social se extienden, y que los datos que empiezan a surgir muestren la severidad del impacto económico de la pandemia.
“Actualmente proyectamos una contracción del PIB de América Latina de poco más de 5% para 2020, con una expansión ligeramente mayor a 3% en 2021”, indicó la agencia en su reporte.
S&P explica que, dada la trayectoria de las tasas de contagio en la Región, la cual todavía está en camino a estabilizarse “sustancialmente”, la restricción de movilidad social “aún está a meses de distancia”.
“Anteriormente habíamos estimado que (por) cada mes de una estricta cuarentena disminuye el crecimiento del PIB anual en un 1.5% a 2.0%…Ese porcentaje ahora parece estar más cerca de 3%, dada la severidad de la desaceleración del consumo en el gasto discrecional y servicios, así como el freno a las inversiones”, señaló.
La semana pasada, Citi Research, filial del gigante estadounidense Citigroup ajustó su tasa de crecimiento económico mundial en 4 puntos porcentuales (pp), a -3.1%. Para 2021, la expectativa de la institución es que la economía global reporte un crecimiento de 5.5%, mayor en 2.5 pp respecto a un pronóstico previo
“Destacamos que, a pesar de que estamos frente a la recesión global más profunda…hay evidencia de que el punto de inflexión está cercano pues los datos de epidemiología, economía real, mercados financieros y precios de materias primas dan (señales) encontradas” destacó Citi Research.
“Nuestro escenario base supone que en las actividades de trabajo estructurado, como las manufacturas, almacenamiento y distribución se asemejaría más a una forma de V (caída profunda-recuperación acelerada)”, señala.
Sin embargo, Citi Research destaca que la confianza y las actitudes derivados del distanciamiento social podrían afectar el retorno a la normalidad en sectores como restaurantes, entretenimiento y turismo, los cuales tardarían aún más en recuperar su dinámica y la confianza de los consumidores (evolución en su actividad en forma de L).