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El continente asiático podría ser foco de atracción para la industria azucarera de México. La sobreproducción y la saturación en el mercado estadunidense obligan a los productores mexicanos a buscar nuevas estrategias.
Millones de toneladas de azúcar mexicana deberán encontrar nuevos mercados en el mundo. Las posibilidades y los retos están ahora en el continente asiático. Esto, resultado de un excedente en la producción y un sobrecupo en el principal mercado al que México exporta el producto: Estados Unidos.
Así lo explica en entrevista con Fortuna Pablo Sherwell, analista de Rabobank –entidad financiera holandesa de carácter multinacional–, quien comenta que el incremento se ha dado en los últimos años debido a una mejora en la parte competitiva, aunado a que ha habido una mayor interacción entre los ingenios y los productores de caña.
“México ha sabido internarse en el mercado de Estados Unidos, nada más que veníamos produciendo 5 millones de toneladas por año y ahora produciremos unos 7 millones de toneladas, lo que implica grandes retos, ¿cómo poder comercializar ese sobreexcedente de azúcar?”, dice el ejecutivo de la firma enfocada en los agronegocios.
Con las proyecciones de Rabobank, comenta Sherwell, se estima que la exportación este año sea de 1.9 millones de toneladas. Y es que México ha incrementado su producción a la par que su vecino país y principal socio comercial.
“Esto ha generado un superávit consecutivo en el mundo y hace que sea más difícil que se coloquen los excedentes. Sin embargo, a finales de junio teníamos ya exportadas 1.2 millones de toneladas de azúcar: 1.1 millones se habían ido a Estados Unidos y el resto a Colombia, Chile, Suiza, Mauritania… Estamos esperando poder entrar a otros mercados, sobre todo al chino, al asiático. Si México sigue modernizándose lo va a poder hacer”. El principal reto al que se enfrenta esta industria es el de disminuir los costos de producción y la operación, dice el analista de Rabobank.
Perspectiva del azúcar en México
De acuerdo con el informe de Rabobank El precio del azúcar para el mercado mexicano, el pronóstico de la producción total para 2012-2013 será de 6.95 millones de toneladas.
Con esta cifra, la producción crecerá en 37 por ciento respecto del ciclo anterior y rebasará el récord histórico de 5.7 millones de toneladas alcanzado en 2004-2005. “Este incremento en la producción es el resultado de una combinación de condiciones climáticas idóneas y un aumento en la superficie sembrada de caña durante los últimos dos ciclos”, apunta.
Pablo Sherwell asegura que con esta cantidad “los ingenios mexicanos estarán estableciendo un nuevo récord que será difícil de superar en los próximos años. Sin embargo, el gran reto para la industria mexicana será exportar su excedente antes de que termine el ciclo en septiembre. De lo contrario, tendremos inventarios muy elevados en el siguiente ciclo y mayores presiones bajistas en precios”.
El ejecutivo de la firma holandesa adelanta que, para el siguiente ciclo, México tendrá otra vasta zafra. Estima una producción de 6.21 millones de toneladas, menor que la zafra anterior pero mayor que el promedio histórico de 5.7 millones de toneladas en los últimos 10 años.
“A pesar de los bajos precios nacionales, sólo esperamos una reducción del 2 por ciento en el área plantada. Nuestra expectativa de rendimientos será menor en comparación con el ciclo 2012-2013, ya que las condiciones climáticas no serán tan idóneas como lo fueron en el ciclo anterior. No obstante, estaremos viendo la segunda mayor zafra de la historia”, comenta.
El informe de la financiera indica que los precios domésticos del azúcar continúen bajistas durante el próximo ciclo 2013-2014. “En este sentido, Rabobank estima que el consumo doméstico de azúcar aumentará, alcanzando los 4.63 millones de toneladas. Sin embargo, la industria azucarera mexicana tendrá otro año en donde deberá exportar alrededor de 1.9 millones de toneladas”.
Para el siguiente ciclo, el banco prevé que las exportaciones mexicanas de azúcar encontrarán en Estados Unidos un mercado menos saturado en comparación a como se encuentra actualmente.
La oferta de azúcar
El mercado azucarero mexicano y el Tratado de Libre Comercio, estudio elaborado por Luis Ramiro García Chávez, investigador de la Universidad Autónoma Chapingo, expone que la producción azucarera en México, desde la época de la Posguerra, tuvo un comportamiento con tendencia creciente, alcanzando su máximo de producción en 1995.
“Los factores que han incidido en las variaciones de la producción azucarera de los últimos años son diversos; entre los más importantes se encuentran el cambio en el régimen de propiedad de los ingenios paraestatales, la reducción de restricciones a las importaciones de azúcar a partir de 1989 y la puesta en vigor de un nuevo decreto cañero publicado en mayo de 1990”, indica el documento.
García Chávez dice que aunados a los problemas anteriores se encuentran algunos otros que también han afectado la producción azucarera: de tipo climático, escasez de créditos y problemas en las relaciones entre cañeros e industriales, así como entre estos y los obreros.
“El problema de financiamiento a la agroindustria cañera se ha incrementado en los últimos años. La falta de liquidez de varios ingenios por dificultades para vender su producción, aunado a la escasez de los recursos crediticios, ha repercutido en los campos cañeros y en los ingenios. En los campos cañeros muchas labores importantes, como la fertilización, no se han realizado; y en los ingenios la reparación y el mantenimiento de maquinaria y equipo se ha efectuado de manera deficiente. Bajo este panorama en varios ingenios del país se ha dado un retroceso tecnológico y son muy pocos los que se han modernizado”, muestra el informe del académico de Chapingo.
El rendimiento de campo, otro factor que determina la cantidad de caña molida, depende de diversos factores: algunos controlados por el hombre como la fertilización, las labores de cultivos y el suministro de agua; otros fuera de su alcance como la temperatura, los vientos, la lluvia. Además, expone, existen otros factores que afectan de manera indirecta al rendimiento en campo, como la superficie por productor y el régimen de propiedad.
“El rendimiento en fábrica, por su parte, depende del contenido de sacarosas en caña y del nivel de aprovechamiento que de ella se hace en el proceso fabril. El contenido de sacarosa en caña es una característica propia de las variedades que se procesan. Su incremento se puede lograr incorporando a los campos cañeros variedades más azucareras, mejorando el manejo en el desarrollo del cultivo y en la cosecha de las variedades comerciales existentes”, expone el documento.