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Faltando poco más de 100 votos por conocerse, la diferencia de sufragios a favor del candidato demócrata Barack Obama inclinó la balanza para reelegirse y conservar la Casa Blanca y frustrar las aspiraciones del republicano Mitt Romney.
Si bien era necesario conocerse un mínimo de 270 votos, la tendencia era totalmente favorable al actual presidente de Estados Unidos.
Obama ganó en estados clave como California, Michigan, Nueva York, Vermont, Illinois, Maryland, Delaware, Connecticut, Rhode Island, Massachusetts, Vermont y Maine.
Mientras Romney se llevó Arkansas, Louisiana, Texas, Kansas, Nebraska, Wyoming, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Alabama, Georgia, Carolina del Sur, Tennessee, Oklahoma, Indiana, Kentucky y Virginia Occidental.
Las mesas electorales en varios estados, entre ellos Virginia, Ohio, Florida y New Hampshire, que pueden decidir el resultado final de las presidenciales estadounidenses, cerraron este martes a las 19:00 horas, tiempo de la costa este de la Unión Americana.
En estados como Illinois y Virginia, centenares de electores desafiaban el frío, y hasta contracciones de parto, para elegir al próximo Presidente de Estados Unidos; mientras que en Nueva York, Nueva Jersey y zonas aledañas ignoraban los efectos del paso del huracán “Sandy”.
En todo el país, miles de votantes repartían este martes a mitad de jornada y llevaban orgullosos la estampa que anunciaba: “Yo voté para la elección presidencial 2012”.
Meses de frenéticas llamadas telefónicas, anuncios televisivos y discursos de campaña hicieron que los electores de Ohio tomaran conciencia de que al Presidente Barack Obama y a su rival republicano Mitt Romney les resultará prácticamente imposible ganar sin su apoyo.
Para Romney en particular, hay pocas vías hacia la victoria que no pasen por este estado ubicado en el centro-oeste del país.
Plenamente consciente de esto, el candidato republicano voló a la ciudad de Cleveland este martes para reunir a sus partidarios y pedirles un último esfuerzo para promover la participación en la consulta.
El vicepresidente Joe Biden hizo una aparición en un restaurante griego, también en Cleveland, yendo mesa por mesa a charlar con los clientes, mientras Obama esperaba los resultados en su ciudad bastión, Chicago.
Cerca de 1.8 millones de personas votaron anticipadamente en el estado, lo que explica por qué se observaban tan pocas filas en varios centros. Pero también hubo muchos que prefirieron cumplir con el ritual del día de las elecciones.
La economía de Ohio ha mejorado a un ritmo más rápido que la del resto del país, con una tasa de desempleo que se situó en 7 por ciento en setiembre, en comparación con el 7.8 por ciento a nivel nacional.
En Estados Unidos, el martes de la elección presidencial no se declara día feriado, por lo que incluso los lugares donde se instalan las casillas llevan a cabo sus actividades de manera normal.
Los observadores aprecian que aunque hay gente cuyos nombres no están en la lista de electores, aun así pueden emitir su sufragio.
Aunque los electores tienen la opción de votar vía electrónica, la mayoría prefiere votar de manera tradicional, marcando la papeleta.
Los electores, muchos de ellos adultos mayores que se apoyan en bastones, andaderas y sillas de ruedas tienen que esperar más de 30 minutos para llegar a la boleta electrónica. A diferencia de la primaria H.D. Cooke, en este centro comunitario no hay boletas de papel.
Así, el primer presidente afroamericano de Estados Unidos es elegido para un segundo periodo.