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Casinos online existen muchos. La ola y moda de los juegos de azar empezó años atrás con empresas como Casino On Net, que pronto habría de popularizar el juego sin salir de casa. La emoción de las salas de juegos, de los casinos parecía no tener futuro a ojos de muchos usuarios conservadores. Finamente, ¿quién querría jugar poker en línea?
El tiempo pasó, llegaron los competidores. La ventaja era enorme, no importaba en qué país estuvieras, podrías jugar, ya sea por diversión o bien por dinero real. La ventaja de la tecnología habría de permitir el pagar el ante de un juego con tarjeta de crédito a través de Internet. La experiencia de Las Vegas se tornaba más económica y sencilla. No habría que hacer maletas, tomar un avión llegar y apostar, con toda la logística que esto implica. Incluso temas como el anonimato no existen en los casinos en Internet.
La comodidad del sillón de la casa, la falta de distractores y la economía de no tener que gastar 30 veces más de lo que apostamos en el viaje hace que nuestra meta de jugar al poker o cualquier otro juego de azar se cumpla aún cuando quizá en nuestro lugar de residencia las apuestas estén prohibidas.
Sí, sólo basta una computadora, acceso a internet, una tarjeta de crédito y una cuenta a que nos puedan depositar nuestras ganancias para poder divertirnos en grande.